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La legitimidad del mercado
G. E. P.
La eficacia de la economía de libre mercado es indudable, basa su legitimidad en la libre aceptación de todos y cada uno de los intercambios realizados. Es la propia tutela pública politizada lo que ha ocasionado a veces los abusos del mercado.
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G. E. P., “La legitimidad del mercado,” accessed November 22, 2024, http://repositorio.fundacionunir.net/items/show/720.
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Title
La legitimidad del mercado
Subject
Panorama
Description
La eficacia de la economía de libre mercado es indudable, basa su legitimidad en la libre aceptación de todos y cada uno de los intercambios realizados. Es la propia tutela pública politizada lo que ha ocasionado a veces los abusos del mercado.
Creator
G. E. P.
Source
Nueva Revista 038 de Política, Cultura y Arte, ISSN: 1130-0426
Publisher
Difusiones y Promociones Editoriales, S.L.
Rights
Nueva Revista de Política, Cultura y Arte, All rights reserved
Format
document/pdf
Language
es
Type
text
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vertido la fábula del aprendiz de allá del status y del funcionamiento brujo en una realidad modélica. de la justicia como poder indepenLa recuperación del ideal del Esdiente del Estado. Pero resulta difítado de Derecho se ha convertido, a cil discutir que los avatares que sulos tres lustros del nacimiento de fre hoy la institución de la Justicia nuestra Constitución, en una tarea están quebrantando nuestro modelo urgente y prioritaria. Ciertamente constitucional de Estado. E. N. comprende aspectos que van más La legitimidad del mercado La eficacia de la economía de libre mercado es indudable. Y está injustificada la sospecha de que necesitaría el control público porque es un mal necesario sin principios éticos: es la propia tutela pública politizada lo que ha ocasionado a veces los abusos del mercado. os últimos y bien conocidos de las experiencias históricas reacontecimientos por los que cientes que por convicción intelecsendas crisis empresariales Ltual, ahora surgen con más fuerza han terminado con el reciente ingrelas críticas basadas en su presunta so en prisión de destacados personacarencia de principios éticos en los jes de la economía española ponen que sustentar su funcionamiento. El de nuevo en duda, ante la opinión mercado se convierte así en un mal pública, dos principios básicos de la necesario con el que nos vemos economía de mercado: la legitimiobligados a convivir, y del que dad del enriquecimiento y la eficaconstantemente hemos de desconcia del mercado para resolver en sofiar para evitar a tiempo sus mayolitario las patologías que en él pueres abusos. Los fenómenos de enridan aparecer. quecimiento rápido, los especuladoAceptada por casi todos la mares, la cultura del pelotazo pareyor eficacia del mercado como inscen ser para algunos las indeseables trumento de asignación de recursos pero inevitables consecuencias de para algunos más por la evidencia una forma de organizar la actividad económica al margen de consideramente, a un coste superior al de sus ción alguna de justicia pero que, eso competidores, se verá condenado a sí, parece eficaz. la quiebra. La retribución por el Sin embargo, no hay nada más riesgo asumido es el beneficio, y la alejado de la realidad que los antejusticia de su percepción deriva de riores planteamientos. La economía una mayor satisfacción social, prode mercado basa su legitimidad en ducida como resultado de su actuala libre aceptación de todos y cada ción. uno de los intercambios realizados. El empresario que es capaz de Capitalistas, trabajadores, empresaintuir la demanda de un bien, y que rios y consumidores, entendidos no lo produce a un coste tal que los como grupos de personas diferentes compradores consideren que el presino como distintas posiciones ecocio pagado es inferior a la ganancia nómicas que todos los individuos siobtenida por su adquisición, es un multánea o sucesivamente ocupan, empresario eficaz y es justamente disponen libremente de sus recursos retribuido por la sociedad a través ahorrando, invirtiendo, trabajando o del beneficio. consumiendo en la medida de sus respectivas posibilidades, y en funBenefícios mutuos ción de la capacidad conjunta de geo enriquecimiento propio nerar riqueza. La libertad para aceptar las transacciones propuestas, y ¿Qué tiene todo esto que ver con para rechazarlas cuando no se estilo ocurrido en la economía españomen favorables, garantiza que de tola? Posiblemente nada, aunque en das ellas se derive un beneficio muocasiones las interpretaciones escutuo. chadas tiendan a confundir algunas En este marco de libertad, la ideas. Los dos casos más relevantes función empresarial resulta crucial. tienen aparentemente en común una Descubrir las demandas de los conmisma cosa: directivos más preocusumidores y satisfacerlas de manera pados por sus respectivos intereses eficiente es el reto del empresario. que por los de las empresas que adNo es esencial que posea capital ministran aprovechan su poder de propio, puesto que podrá reclamarlo gestión en beneficio propio, a costa en préstamo para desarrollar su prodel resto de los accionistas. Las opeyecto; sí es imprescindible que no raciones realizadas carecen de la lese equivoque en sus hipótesis de tragitimidad descrita para las transacbajo. Si produce bienes o servicios ciones que se verifican a través del no demandados, o lo hace ineficazmercado; no existe intercambio muprocesos de fusión en el sector bantuamente beneficioso, sino enriquecario al margen de la voluntad de cimiento de uno a costa de otros, los accionistas implicados, tal y coproducido como consecuencia de la mo se puso de manifiesto posteriordeslealtad en la gestión de intereses mente. Los equipos de gestión destiparcialmente ajenos: como consetuidos alcanzaron sus puestos encacuencia, por tanto, del engaño. bezando un movimiento de contesEl inmenso desarrollo de las tación de los accionistas contra aleconomías modernas ha hecho negunos intentos fraguados al margen cesaria la aparición de grandes entide voluntad de éstos y que desde el dades en las que el ahorro pertenepoder político se les trató de impociente a un gran número de sujetos ner. La necesidad de actuar coacties administrado por algunos indivivamente se deriva en buena medida, duos, elegidos por ellos. Esta disopor lo tanto, de las dificultades exisciación de propiedad y gerencia es tentes para sustituir con normalidad una característica típica del capitaa un mal equipo gestor unas difilismo contemporáneo, y una consecultades que son consecuencia de cuencia necesaria de la utilidad que las suspicacias de aquellos que tese deriva de la puesta en común de mían ser, de nuevo, manipulados. grandes cantidades de capital. Esta realidad novedosa obliga a adaptar Conviene tener presente también constantemente nuestras leyes, para que el mal funcionamiento de dishacer posible que los accionistas tintas instancias públicas ha podido minoritarios puedan controlar sus incidir en un exceso de confianza intereses de modo efectivo, ponienpor parte de los accionistas. Hay podo en sus manos instrumentos adecas actividades económicas tan incuados y sancionando rápida y sufitervenidas y tuteladas en todas sus cientemente los incumplimientos. etapas como las financieras en general y las bancarias en particular. AuAparentemente, el caso Banesto ditorías anuales legalmente exigidas ha puesto de manifiesto la necesidad y públicamente supervisadas, insde una tutela pública directa para alpecciones del Banco de España, canzar esos deseables objetivos de controles fiscales, aprobación admicontrol. Sin embargo, conviene renistrativa previa de las sucesivas cordar en qué medida la actuación ampliaciones, etc.: todo ello puede de la Administración ha contribuido razonablemente ofrecer a los ciudao ha permitido llegar a la situación danos interesados la impresión de en la que finalmente se ha desemboque alguien en la Administración cado. Hay que recordar que fue una vela por sus intereses. Pero la soludecisión política la que desató unos na, también en la económica, pero ción traumática a una crisis en estano es consustancial a ellas. Lo que do avanzado pone de manifiesto que ahora debería demandarse, a la vista esa impresión era un error, pues la de lo acontecido, es una estructura ineficacia de esos controles previos legal e institucional más justa y efies evidente: al contrario de lo que se caz que la existente en la actualidad, pretendía, tal vez hayan contribuido que garantice a los pequeños accioa debilitar las peticiones y demannistas la efectiva protección de sus das de control desde dentro de la intereses, que posibilite en su caso propia entidad. la rápida exigencia de responsabiliEn todo caso, lo importante no dades y que sancione las conductas es tanto denunciar los claros errores punibles. Esa reforma no puede ser de los mecanismos públicos de conrectamente concebida como un límitrol, como más bien destacar la falta te al funcionamiento del libre merde relación entre estos fenómenos y cado, sino como una mejor configuel funcionamiento de una economía ración de sus cauces naturales de de libre mercado. El engaño puede desarrollo. G. E. P. existir en cualquier actividad huma