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Mitologias africanas

Luis Alberto de Cuenca

Reseña literaria de "El Decamerón negro" de Leo Frobenius.

File: Mitologias africanas.pdf

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Referencia

Luis Alberto de Cuenca, “Mitologias africanas,” accessed April 26, 2024, http://repositorio.fundacionunir.net/items/show/2498.

Dublin Core

Title

Mitologias africanas

Subject

Artes y Letras

Description

Reseña literaria de "El Decamerón negro" de Leo Frobenius.

Creator

Luis Alberto de Cuenca

Source

Nueva Revista 006 de Política, Cultura y Arte, ISSN: 1130-0426

Publisher

Difusiones y Promociones Editoriales, S.L.

Rights

Nueva Revista de Política, Cultura y Arte, All rights reserved

Format

document/pdf

Language

es

Type

text

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n recinto dedicado enteramente al ensueño. Mitos, cuentos y leyendas. Lo más Mi vida en la maleza de los fantasmas cuenta la aventura de un niño remoto de los pueblos visto a través de finos cendales poétique se adentra en un extraño territorio poblado de seres que han muerto cos. El encanto de toda lejanía, a destiempo y que aguardan a que llegue el momento de trasladarse deaprisionado en las más seductofinitivamente al país de los muertos. Los fantasmas de Tutuolason una ras formas de la épica, desde el himno sagrado hasta el picante especie de qremlins malignos que sólo disfrutan molestando a los vivos. relato popular.» Así rezaba el texto de propaganda de la serie «Musas lejanas», una estupenPor Luis Alberto de Cuenca da colección que inició su andadura a mediados de los años veinte y que llegaría a publicar catorce títulos entre 1925 y 1929. Auspiciaba la serie Revista de Occidente. Allí vieron la luz, entre otros libros, una espléndida traducción del Cantar de Roldán por Benjamín Jarnés y la admirable versión de Pedro Salinas del Poema de Mío Cid (las dos en 1926): ambas se encuentran hoy en el catálogo de Alianza Editorial. Pues bien, el primero de los catorce títulos de «Musas lejanas» —los estoy viendo felizmente juntos, en un privilegiado estante de mi biblioteca— fue El Decamerón negro de León o Leo Frobenius, magníficamente trasladado al castellano del alemán original por J. R. Pérez Bances e incorporado providencialmente al fondo de Alianza desde 1986 («El Libro de Bolsillo», núm. 1.154), pues tanto la princeps de 1925 como la segunda edición de 1950 constituyen rarezas bibliográficas de no fácil adquisición. Dicha traducción castellana se llevó a cabo sobre un Schwarze Dekameron de 1910 (como la presente desde 1938 en el catálogo de la editorial argentina Losada, sexta entrega de la conocidísima «Biblioteca Clásica y Contemporánea»), pero Frobenius reunió más tarde, en los doce volúmenes de su Sammlung Atlantis como burlescos, del Africa Central, y es de esa recopilación de donde Ulf Diederichs extrajo su Schwarze Dekameron de 1969 (DüsseldorfKoln, Eugen Diederichs Verlag), que fue traducido a nuestra lengua por Gladys Anfora (Buenos Aires, Losada, 1979) en un grueso volumen que 69 NUEVA REVISTA JULIO 1990 novelas laillclSllcaa lucio wwwiwu de Tutuola, My Life in the Bush ofGhosts, traducida en nuestros pagos por Maribel de Juan como Mi vida en la maleza de los fantasmas. El inglés de Tutuola se adapta al mito africano con una flexibilidad tal, que no echamos de menos que el autor no utilice su lengua materna, el yoruba, en sus relatos. Algo así como le sucede al alemán de Frobenius con las leyendas del Sahel. Mi vida en la maleza de los fantasmas cuenta la aventura de un niño que se adentra en un extraño territorio poblado de seres que han muerto a destiempo y que aguardan a que llegue el momento de trasladarse definiTassili. Ozaneare tivamente al país de los muertos. Escena de Familia. Los fantasmas de Tutuola son LITERATURA FANTASTICAl una especie de gremlins malignos que sólo disfrutan molestando a los vivos. El itinerario que Africa Central, infinidad de hislúmenes, 18991901) llama a circuló poco por las librerías esinicia el protagonista de la notorias, las ha anotado escrupuesas tres etapas Ergriffenheit o pañolas. vela no puede ser, pues, más telosamente y las ha vuelto a re«emoción», Ausdruck o «expreLeo Frobenius nació en Berrrorífico. En el fondo, se trata ferir sin quitarles un ápice de su sión» y Anwendung o «aplicalín el 29 de junio de 1873. Era de contar el terror del hombre encanto inicial. Repartido en ción». hijo de un oficial retirado del ante la naturaleza, su postración dos áreas temáticas, la caballeejército prusiano. Con esos anBastantes de sus sesenta libros ante los dioses. Tutuola refleja ría y el amor por una parte, y los tecedentes, su pertenencia a una se ocuparon de Africa, un conese miedo en el lenguaje de los cuentos y fábulas populares por determinada generación y su astinente aún misterioso y lleno de cuentos populares, los relatos otra. El Decamerón negro es pecto personal (bigote, perilla, prestigios para el hombre occique las abuelas cuentan a los niuno de esos libros cuya lectura pelo aplastado, grandes orejas, dental de principios de siglo ños en las noches del trópico, es una fiesta que anula el tieminmaculada seriedad), podría (piénsese en el Tarzán de Edgar frente a la selva impenetrable. po, una maravillosa fiesta de nohaber formado parte de la galeRice Burroughs o en las novelas La edición de Siruela incluye el cumpleaños. ría de nazis perversos que pueafricanas de Henry Rider Hagprólogo de Geoffrey Parrinder blan las películas de Indiana Jogard). Tal vez su obra «africaEn la Atlântida de Frobenius, que precede a la edición británines. Explorador y etnólogo, na» más famosa sean los tres toes decir, en Nigeria, concretaca de Faber and Faber. «La maFrobenius dirigió doce expedimos de Und Afrika sprach mente en la ciudad de Abeokuleza desconocida con sus aterraciones a Africa entre 1904 y (19121913) y varios trabajos de ta, una de las más grandes del dores espíritus extiende sus ten1935. En 1925 fundó en Frankdiferente fecha en los que aporoeste del país, nació hace setentáculos —escribe Parrinder— furt el Instituto de Investigación ta pruebas «concluyentes» acerta años Amos Tutuola, hijo de como los árboles de un dibujo de Morfología de la Cultura, coca de la existencia de la Atlântiun protestante cultivador de cade Arthur Rackham, y constitumenzando a enseñar poco desda y de su identificación con Nicao. Cuando tenía doce años fue ye uno de los lugares más pavopués Antropología Cultural en geria. Otra de sus audaces y fana la Escuela Central Anglicana rosos que la literatura ha imagila Universidad de esa misma ciutásticas conjeturas fue atribuir de su ciudad natal, pero tuvo nado.» En Africa, como en el dad, de cuyo Museo Nacional de un origen común a las culturas que interrumpir sus estudios cinresto del mundo, la literatura Etnología se hizo cargo a partir de Oceanía y del Oeste de Africo años más tarde, al fallecer su imita a la vida. La vida heroica, de 1934. Murió el 9 de agosto de ca, basándose en la distribución padre. En 1939 fue a Lagos paobscena o simplemente horrible 1938, mientras veraneaba en Itade ciertos elementos culturales ra aprender el oficio de herrero, que, respirando a pleno pulmón lia, a orillas del lago Maggiore. comunes a ambas. que luego ejerció en la aviación en los Marchen centroafricanos nigeriana desde 1942 hasta 1945. El Decamerón negro (tanto en De sus investigaciones y esturecopilados por Frobenius, está Luego trabajó para el Ministerio su versión original de 1910 codios sobre el arte prehistórico y siempre a punto de ahogarse en de Trabajo y para la Radiotelemo en la refundición de 1969) de sus trabajos de campo en el la fantasmal espesura forjada visión de su país como almaceestá maravillosamente escrito. continente africano Frobenius por Tutuola. nero, retirándose en 1976. AcFrobenius ha escuchado de ladedujo que las culturas cumplen tualmente vive en Ibadán. bios de los bardos de los Sahel un ciclo vital completo y, como Luis Alberto de Cuenca es investigador del C.S.I.C., filólogo y poeta. Pre—el pueblo que habita la región entidades autónomas con vida El volumen número 33 de la mio de la Críica (1985) por La Caja homónima, entre el Sáhara y la propia, atraviesan etapas de jucolección «El ojo sin párpado» de Plata, y Premio Nacional de Tragran selva del Níger—, y de los ventud, madurez y vejez. En de Siruela es, precisamente, la ducción Juvenil (1989) por el Cantar de muchos otros pueblos del Próbleme derKultur (cuatro voversión española de una de las de Voltario. 83 NUEVA REVISTA JULIO 1990