Nueva Revista 025 > América o el tercer hombre
América o el tercer hombre
Pablo Antonio Cuadra
Nos hace referencia al descubrimiento de América que dió al hombre una conciencia planetaria, además el comienzo el desarrollo de las ciencias humanas: etnografía, antropología, arqueología, etc.
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Pablo Antonio Cuadra, “América o el tercer hombre,” accessed November 22, 2024, http://repositorio.fundacionunir.net/items/show/2365.
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Title
América o el tercer hombre
Subject
Especial quinto centenario del descubrimiento de América
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Nos hace referencia al descubrimiento de América que dió al hombre una conciencia planetaria, además el comienzo el desarrollo de las ciencias humanas: etnografía, antropología, arqueología, etc.
Creator
Pablo Antonio Cuadra
Source
Nueva Revista 025 de Política, Cultura y Arte, ISSN: 1130-0426
Publisher
Difusiones y Promociones Editoriales, S.L.
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Nueva Revista de Política, Cultura y Arte, All rights reserved
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document/pdf
Language
es
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Dos páginas dei catecismo ilustrado de fray Pedro de Gante, evangelizador de los Índios. AMERICA 0 EL TERCER HOMBRE Por Pablo Antonio Cuadra Nun« 10 hubitra lltgolas ciencias humanas: etnografía, antropología, U , N exceso de pudor histórico un do a la CO»WOYIII6H y ai arqueología, etcétera, y así la identidad del hom1 extremismo en nuestro juicio del limiff IHHÍIÍQ bre americano en la medida en que integraba pasado, que, como todo extremisrazas y culturas se iba formando y perfilando mo, nos oculta la realidad ha querihi»panoamorl«no«, si teniendo como dinámica interior el descubrir »i do poner fuera de circulación la palaa los doi do»cwbrimionconstante de sus raíces y de su pasado, ¡PARA bra DESCUBRIMIENTO al designar el acontecitoi citado» BO «o agroAMERICA SU HISTORIA ES DESCUBRIRSE! miento del 12 de Octubre de 1492. go ol má» important* Ya desde el comienzo los Mayas nos sorprenPero la hazaña de Colón no solamente inició quo luo y o» oi donoden, cuando sus sabios aprenden a escribir en el una serie de descubrimientos paralelos: el descubrimionto do Cristo por brimiento de América por España y Europa; el alfabeto español su POPOLVUH y sus CHILANES ol indio do Amóri« descubrimiento de América por América...como BALANES, con la genial recreación que hacen de dice David Vela, escritor guatemalteco:«el descusus tradiciones y de sus formas literarias al desbrimiento de América dio al hombre una conciencubrir la Biblia y la cultura occidental: es un caso cia planetaria» sino que, además, con el descuinaudito: reinventar la memoria, promover como brimiento de América comienza el desarrollo de defensa un mestizaje contra el mestizaje. ¡Esto poco se ha profundizado! Pero es dinamismo del La mayoría de los historiadores eluden presentar la función protagónica de la religión en la fordescubrir sustancial a América, que siglos desmación de América. Olvidan que los dos grandes pués expresó Darío en su salutación «AL REY momentos expansivos de la civilización europea OSCAR»,., nMientras haya... una imposible hazalas Cruzadas y la Conquista de América fueron ñauna América oculta que hallar, vivirá España», de motivación religiosa y que, ai encender esta verso que lleva oculta su contraparte, pues tamfuerza motora, produce transformaciones medubién, mientras haya una España y un Occidente lares en los pueblos. Podemos dividir en tres granque descubrir, ¡vivirá América! des etapas la historia religiosa de América. Sólo contando con la dinámica de ambos descubrimientos se comprenden movimientos tan 1} La primera etapa corresponde al período La mayoría do lo» hismás antiguo de !a prehistoria indígena, llamado profundamente americanos como el levantatoriador»» eluden pro«periodo arcaico» que cubre desde el comienzo miento en cadena de los municipios para la Inde»ontar la función prode las poblaciones primitivas hasta el nacimiento pendencia, el Barroco, o el Modernismo o las de las altas culturas. La religión de este periodo la totónica do la roliqiòn Vanguardias. simboliza el JAGUAR, que es el culto a las fuerzas en la formación do de la naturaleza. América Descubrir, verbo americano 2) El siguiente es el período de las grandes culturas clásicas: Olmecas, Mayas, Toltecas, etcétera, Descubrir a Occidente y asimilarlos, descubrirse que puede ser simbolizado por la SERPIENTE, el a sí misma e ir cobrando conciencia lentamente de culto a los astros, sus leyes e influencias, a través la propia identidad mestiza suma de culturas, ha de calendario; y ia terrible teología de que el homsido, en esencia, nuestra empresa histórica; pero bre debe alimentar y mantener a los dioses con su nunca se hubiera llegado a la cosmovisión y al sinsangre. gular humanismo hispanoamericanos, si a los dos 3) La siguiente etapa es la decadencia o desadescubrimientos citados no se agrega el más parición de esas culturas clásicas, el desarrollo de importante que fue y es el descubrimiento de Crisimperios elementales y militaristas y, de pronto, la to por el indio de América. tercera gran revolución religiosa, la del PEZ: que Mostrando una gran superficialidad o un cegasignifica la llegada del Cristianismo y la victoria de dor prejuicio, la mayoría de los historiadores no Cristo sobre las fuerzas de la naturaleza, sobre los cristianos, pasan sobre brasas o no le conceden secretos siderales e incluso sobre la concepción importancia al extraordinario fenómeno de la conde la muerte. La teología del Amor muestra un versión de todo un continente. «Por la forma en DiosHombre que no pide sangre sino que la da que se ííevó a cabo y ía amplitud de sus resultados por la redención humana. dice el historiador chileno Bravo Lira esta evanEl JAGUAR nos acerca a los egipcios, la SERLa» cultura» indiq» gelización en América, que se completa en los PIENTE a los caldeos; el tercer paso nos incorpora quo conocieron lo ruesiglos siguientes, no tiene paralelo. Es hasta ahoa la Biblia, es decir, al libro del destino universal. da poro no pudieron ra el más vasto y fructuoso esfuerzo misional en la América se abre geográficamente, racialmente, nunca utilitario Pitahistoria déla Iglesia». Posiblemente quienes guarpolíticamente, teológicamente. ba« impedida» on «u dan silencio ante este hecho sin paralelo no han conversado en confianza con un indio boliviano, o desarrollo y lo» era con un ecuatoriano o un indio náhuatlmexicano. imposible (a potar do La religión inmóvil Su profundidad religiosa que ha maravillado a tul extraordinaria» poetas como Thomas Merton me hizo pensar capacidade» de InventiEn este punto el espectro de América nos ofreuna vez que el indio es naturalmente santoy cuance innumerables sugerencias para la reflexión. va y creación) «altor do do se lo dije al gran poeta senegalés Sedar SengPor ejemplo ésta: Las culturas indias de Meso y lo Edad de Piedra o do hor, me contestó: Es la capacidad que también tieSur América tienen en su arte algo en común: los Metale» o la ne el africano de descubrir lo sobrenatural en lo «una acusada voluntad de perseverancia». Para siguiente etapa natural. ¿Han visto ustedes las multitudes que se esas culturas «Dios no es nuevo», la novedad no reúnen alrededor de Juan Pablo II en sus visitas a es interesante. Dios es Viejo y Eterno: plasmar América? No es el número aunque el número es esta representación vieja, tradicional y sacra de lo también una señal sino esa cercanía de sus ojos divino es la misión del arte para el indionos dice con el misterio. Parece que nos llevan siglos adePaul Westheim. La misión del hombre precolomlante en el acercamiento a lo inefable. bino no es cambiar al mundo, ni crear un nuevo orden del mundo, sino conservar rigurosamente tiva y creación) saltar de la Edad de Piedra o de los el orden viejo y eterno. Metales a la siguiente etapa. Estaban impedidas de romper el círculo de una repetición sin futuro. CualEstas civilizaciones, de profundas raíces conserquier mayor avance exigía esclavitud, una dosis de vadoras, se ven de pronto y generalmente en foresclavitud cada vez mayor cuanto mayor fuera su ma violenta, mezcladas, fusionadas con una civiliprogreso, o sea una esclavitud tal que los devolvezación de signo contrario en sus raíces. Con una ría al punto de partida. Ya no podían por sí solas (y religión de ta Buena NUEVA. Como dice el filósofo no por su culpa} emparejarse con el proceso evolupolaco Kolakowski: «a civilización de la conjunción tivo del hombre histórico universal. La llegada de de raices griegas, latinas, judaicas y cristianas ha Europa, aunque produjo con frecuencia choques sido una civilización que se ha mostrado capaz de brutales más brutales cuanto mayor era la disparipromover cambios rápidos y tumultuosos en la dad de técnicas y culturas llenó ese vacio con una ciencia, la tecnología, el arte y el orden social». dinámica nueva y transformadora. Pero lo que se (Acabamos de ver esa capacidad de cambio en la produjo no podía menos que producirse y yo creo Europa del Este}. América fue, pues, el choque de que ese hecho esa fusión postergada de un pedauna herencia inmovilista con la contraría. Para Quetzalcóatl en el Códice zo de humanidad retrasada en su proceso con el Borbónico. conocer más a fondo el peso de esa inmovilidad, dinamismo occidental estaba y está cargada de tomemos en cuenta este dato: la falta de animales futuro. No hemos sabido todavía a través de una de tiro como el caballo y el buey, que le daban funeducación espiritual y científica desarrollar todas ción civilizadora a la rueda, fue decisivo para la forsus posibilidades. Todavía llevamos dentro esta mación de Hispanoamérica. Esa falta de rueda fue mezcla de opuestos, esta dualidad contradictoria: la presión mayor para que se produjera el mestiza¿cuál será su síntesis? ¿Cuál será el resultado final je, porque las culturas indias que conocieron la al fusionarse los dos ritmos y sus dos valoraciones rueda pero no pudieron nunca utilizarla estaban del tiempo y la eternidad, de la actividad como impedidas en su desarrollo y les era imposible (a medio y como fin, del ocio y del negocio? pesar de sus extraordinarias capacidades de invenQuotial<óatl o» un El mito de Quetzalcóatl ütgjjg «ufíral. tan Bgjggfa y mordlMto Hay otro punto que merece también nuestra y ya lodo» »abomo» reflexión. En Mesoamérica Cristo tuvo una especie lo yo «Ifnlfljé Quotde profecía profana como lo fue para la Europa igkM y l< a> oy»d¿ naciente la Egloga IV de Virgilio y esa profecía es ol mito do «u roqroso o el mito de Quetzalcóatl el mito de mayor contenila victoria do Horaén do humanista de la América prehispanatanto así Cortó» »obro ol militaque algunos misioneros creyeron que Quetzalcóatl no era otro que el apóstol Santo Tomás, rlimo aitoca y tu Quetazcóatl fue un héroe cultural, creador y funomporador jortingg dador de cultura. Su doctrina religiosa estructura un humanismo trascendente: aspira a que el hombre sea el soberano de sus propias decisiones y los medios que propone para alcanzar este humanismo son el ascetismo y la sabiduría de la contemplación. Su nombre Quetzalcóatl, pájaroserpiente o serpiente emplumada, simboliza el equilibrio entre materia y espíritu, entre fuerza y razón. Y entre sus mandatos morales destaca su no rotundo a los sacrificios humanos y su antímiütarismo. Mientras predominó su doctrina, la arqueología comprueba, como dice Covarrubias, la ausencia de vestigios de guerra y de sistemas defensivos. El Señor del Mar. Escultura Estas ideas no podían satisfacer a los nacientes criolla en El Callao. Siglo XVII. impulsores de un primario imperialismo militarista. £1 mito nos narra la forma en que Tezcatlipoca engaña y traiciona a Quetzalcóatl. Lo emborracha con pulque y lo hace caer en pecado. Entonces, avergonzado, se exilia voluntariamente y promete volver. Parte al exilio por el mar en una balsa de serpientes. La imagen es de impresionante belleza. Pero, para mí, lo más importante de este mito es que, a pesar de la derrota y fracaso de Quetzalcóatl, el militarismo vencedor, que impone los sacrificios humanos y la guerra, se ve obligado a incorporar su memoria y sus principios morales a la nueva religión y a la nueva cultura militarista. La memoria del pueblo es fiel a sus ideales. Pero Arriba Fray Bartolomé de entonces, el militarismo, asi como lo incorpora, a Las Casas. la vez lo traiciona. Y esta contradicción farisea Izquierda: Hernán Cortés, hace que Quetzalcóatl se convierta en el remordiconquistador de México. miento de nuestra historia indígena. Quetzalcóatl es un meaculpa cultural, tan profundo y mordiente que ya todos sabemos lo que significó Quetzalcóatl y lo que ayudó el mito de su regreso a la victoria de Hernán Cortés sobre el militarismo azteca y su emperador Moctezuma. El otro remordimiento Pues bien, esta original característica de la historia del indio mesoamericano de llevar dentro de sí una figura dinámica y subversiva que hace veces de conciencia crítica y de remordimiento humanista contra los opresivos vuelve a repetirse en la historia de la conquista y colonización, La Loyondo Hogra, »o cuando España impone a veces con la espada la posee el remordimiento como elemento dinámiconvlorto tu romordireligión cristiana, pero suscita con ella, desde los co de su identidad! mionto. Romordlmlonprimeros misioneros y desde la conciencia de sus Sin embargo, el remordimiento ese elemento lo quo no win, quo no reyes y de muchos de sus hombres de espada, bíblico inserto en nuestra historiafunciona poruna autocrítica interna y permanente a la conquis»o apacigua on raién que somos un pueblo mestizo, es decir, el prota, al dominio y a la explotación. do o»o» valoro» o»piriducto a veces violento de la dialéctica del amor. Hispanoamérica no es la civilización de trasplante lualo» v moralo» oiiLo que se ha llamado la Leyenda Negra nace de de Estados Unidos que se desarrolla con éxito, esa autocrítica que produce el cristianismo en ponto» y porfoccioni»según sus propias leyes, en tierra nueva sino la forma parecida a lo que sucedió con QuetzalcóatlIB» quo cuoitlonaron a creación de un MUNDO NUEVO por una serie de al contrastar la doctrina y la práctica. Las denunnuoilra política oyor y descubrimientos, encuentros, choques y fusiocias del Padre Las Casas, de los frailes, de los teóla ilfluon cnoationando nes. El resultado todavía en proceso lo definió logos, se convierten en tabla de valores morales, hoy. jMfOjtra América lapidariamente Bolívar »No somos españoles, no y de este modo, la Leyenda Negra, acumulándose o» lo único quo po»oo ol somos indios; somos otra cosa». en ei subsuelo de nuestra historia, se convierte en romordimlowto como remordimiento, ¡Es el remordimiento de nuestra Hispanoamérica es el lecho erótico de un tercer olomonto dinámico do historia contra nuestra historial, remordimiento hombre. Y ese tercer hombre es, fundamentalsu idoHtidndi que no cesa que no se apacigua en razón de esos mente, la fusión de lo indio y lo hispano (o más valores espirituales y morales exigentes y perfecampliamente de lo americano y lo europeo) con cionistas que cuestionaron a nuestra política ayer un aporte poderoso de lo africano. En América se y la siguen cuestionando hoy. Salvo eí pueblo vuelve a comprobar la virtud creadora de ese israelita. ¡Nuestra América es la única cultura que aporte negro que contribuyó a forjar el Medíterráneo, El mestizaje fue así un proceso de integración The First América, señala con agudeza la originaliy et tipo nuevo que produjo es la consecuencia del dad con que el franciscano Juan de Torquemada y ideal de misión y del concepto del hombre del el Inca Garcilaso de la Vega desarrollan sus intercatolicismo español, pero no sin pasar por la pruepretaciones del pasado indígena de México y de ba y la contradicción con las ideas guerreras y del Perú, sembrando la semilla de la primera forma de trato al vencido que prevalecían entonces, no sólo patriotismo criollo que se desarrollaría en los siglos entre europeos sino entre los mismos indios. siguientes encendiéndose en el culto mexicano a la Virgen de Guadalupe y en el culto peruano a Santa Rosa de Lima hasta adquirir su mayor esplendor Pasatismo vs. Futurismo a finales del siglo XVIII; patriotismo que quiere realizar, ya en el siglo XIX, la singular fusión de un republicanismo católico con un nacionalismo insurgenEn la dramática formación de nuestra América mestiza hay un movimiento dobley contradictorio te aunque como veremos adelante algo detiene en su dirección: fuerzas que tienden a mantener la entonces la dinámica creadora del mestizaje y mentalidad medieval y fuerzas que quieren crear EH IO dramática fortimcomenzamos a perder identidad imitando los una historia nueva. Un pasatismo en lucha con un ción dt nwtrn Amériesquemas y fórmulas ajenas. futurismo. co mostiie hay un Por ejemplo: Cuando Colón descubre América, mavímianfo dohfa y dentro de su mentalidad visionaria, prevalecen Vigencia del prójimo contradlctorio on ia algunas creencias y algunas imágenes del mundo diracciòn: fuario» qao medieval; está descubriendo lo NUEVO, pero se le Pero, volvamos atrás: Paralelamente al mestitlandan a mantanar IB interponen las teorías y tabulaciones antiguas; cree zaje en América y al pensamiento misionero de mowtalidod wdioval y que América es Cipango o que somos la India y por teólogos y misioneros de un Bartolomé de Las fworyai qua qaloran esa medievalidad todavía se llaman indios nuesCasas, de un Motolinía, de un Tata Vasco de Quicitar una hiitorla nuotros indios. Pero contra esa resistencia del pasado, roga en España se produce el desarrollo de un Vfl la corona, los reyes y sus navegantes imponen el pensamiento nuevo sobre la relación entre nacioverdadero rostro de la realidad: somos un NUEVO nes. Surge el pensamiento de Suárez y de Vitoria MUNDO y eso nuevo funda no sólo una nueva {Suárez influyó en la mayoría de los filósofos que geografía universal sino una nueva edad. crearon el pensamiento moderno como Descartes, Espinoza, Leibníz, etc.) y Vitoria es el Padre del Luego, cuando los descubrimientos dan fatalDerecho Internacional o Derecho de Gentes mente a las conquistas, la tradición medieval, todamoderno, uno de los ingredientes de la Edad vía viva, vuelve a imponerse en la empresa españoModerna y de su estructura pluralista. la y lusitana y se establece la esclavitud o el servicio forzado o la «encomienda» sobre el vencido. Y otra Es decir, fue el descubrimiento doctrinario y vez la fuerza nueva, motivada por el cristianismo y práctico de la OTREDAD. El concepto cristiano de sostenida y alentada por la Iglesia misionera y por prójimo se hace sustancia social de América. En El <riitianUmo parti«los reyes, se enfrenta con esa medievalidad exiEstados Unidos al indio se le extermina o se le w y ¡hh> »»ya 1« lucha giendo otro trato para el indio, decretando las reduce a RESERVAS, excluido del mundo nuevo par la justicia, por al LEVES NUEVAS y empeñándose en una larga lucha que quería crear el blanco anglosajón. En Hispanobionoitar, y par la llbapor lo que hoy llamaríamos JUSTICIA SOCIAL con américa el Indio, con frecuencia, fue obligado a serfaclÓM do loi puablo»; el vencido. ACTITUD que nos revela la fuerza dinávidumbre y explotado; pero no excluido del mundo para no paada »»titiiir mica de la fe y los principios cristianos que los hisnuevo y al final de esa noexclusión y gracias al can alia la «aparior y toriadores no suelen tomar en cuenta, principios cruce a que dio lugar entre dominadores y domitranondanta ampraia capaces, en este caso, de crear una situación comnados surgió el nuevo hombre americano. da la Radoacián pletamente nueva, una ética nueva que establecía Naturalmente que el mestizaje no fue siempre una ruptura con todo el pasado de la historia humaun idilio o un beatifico matrimonio, Es el segundo na, ya que el sistema de esclavitud y de trabajo foracto de un choque guerrero de culturas y razas. Ni zado del vencido, no sólo era uso y costumbre de siquiera podemos decir que al principio salvo Occidente y Oriente sino también como acabo de excepciones funcionara muy cristianamente, decido de los mismos indios en todas sus culturas. pero sí podemos decir que obedecía a una falta de Así, pues, el «remordimiento» funciona; pero tamprejuicios que se derivaba del humanismo católibién algo más positivo engendrado por la dialéctica co. Comenzó produciendo, no legitimidad sino del amor del mestizaje. David Brading, en su libro bastardía. La familia que lamentablemente se Simón Bolívar. estableció sobre el mestizaje fue una familia con frecuencia desequilibrada y problemática. El tercer hombre el mestizo fue por mucho tiempo un desclasificado. No se sabía qué hacer con él: nacía en tierra de nadie; ni lo apreciaba la raza dominadora española, ni la dominada indígena. Pero, poco a poco, ese Tercer Hombre fue el hombre paradigmático de América: sumaba dos cufturas y, sobre todo, resolvía el conflicto de razas por la dialéctica del amor. Llevaba en sí mismo la tarjeta genética del NUEVO MUNDO. El despreciado fue la piedra angular. El mestizo fue América. Yo agregaría: en la medida que nuestro TERCER HOMBRE ha sido fiel a su empresa integradora, y ha sido creador de sus soluciones históricas y no imitador; en la medida que el dinamismo de su historia ha sido el amor y no el odio o la indiferencia, América ha construido futuro. En cambio, la traición a ese signo ha dado como resultado inmediato la cultura de la Muerte y del Terror, guerras civiles y dictaduras. Los 3 tipos que hicieron América Pero todavía cabe otro enfoque sobre nuestro TERCER HOMBRE: Si estudiamos sus realizaciones históricas, vemos que el mestizo es heredero de los tres factores humanos que hicieron América: el hombre de espada, el hombre de la cruz y el hombre de toga. Cada hombre de esos forma su réplica Norteamérica, decía, al realizar su revolución Surg« »I pensamiento en el indio y de esas tres tesis y antítesis se ha ¡do rompe con Inglaterra, pero no con el espíritu ni con formando la síntesis americana todavía en procede Suároi y d» Vitoria, el impulso histórico que llevó a su pueblo a la tierra so. Sin embargo, de esos tres factores hay uno que americana; tampoco renuncia a la teología protesquo os ol Padro del ha ido perdiendo (y que debe seguir perdiendo) su tante, ni cuestiona su morai, sino que la revolución Derecho International o primogenitura hasta ser absorbido por la civilidad: estadounidense es un despliegue, hasta hoy, de las Derecho de Gentes es ei hombre de espada. La civilización de América fuerzas impulsoras de aquella primera semilla cuyo moderno, uno de lo» avanza a la eliminación del hombre de espada y a brote en 1730 fue llamado «El gran despertar». ingredientes de lo Edad darle una significación civilizadora cada vez mayor En cambio, nuestra revolución iberoamericana Moderna y do su estrucal hombre religioso y al hombre jurídico No es que de la Independencia lo que primero hizo, después tura pluralista vayamos a sacar del museo, con ímpetus fundade exiliar o maltratar a sus libertadores, fue un cormentalistas, una teocracia, pero sí una revalorizate radical antihistórico en el conducto mismo de su ción, una puesta en su lugar real del valor trascenética social. La revolución perdió así ios valores étidente del hombre. Para América si sigue el camicos para legitimar su autoridad, perdiendo su fluino emprendido de fidelidad a sí misma tiene un dez en una sangrienta intermitencia de guerras y valor decisivo y fundamental lo sagrado. dictaduras, en las que se sucedían en relevo ¡deas importadas y utopías, generalmente deletéreas Pero estudiemos no sólo nuestra tradición sino mientras la Iglesia Católica, forjadora del alma mestambién nuestra traición, En una conferencia tiza y último eslabón de unidad popular, se insertareciente hacia ver la desviación histórica de Iberoba en esos antagonismos o era perseguida por los américa comparando las dos revoluciones de la gobiernos, no quedando, de los elementos que forIndependencia, la de Estados Unidos y la de los maron América, más que una contienda perpetua. países del Sur. ¡ Este es el momento en que cobra toda su fuerDe esta manera nuestra alma colectiva, nuestra za retenida el sustancial aporte del Cristianismo al identidad, sufrió la distorsión de una nefasta hipodesarrollo de Iberoamérica! cresía: la de creer en privado una cosa y renegar de ella o bien ocultarla como delito en público. La ley dinámica del Cristianismo nunca fue construir paraísos en la tierra. (Para el Cristiano no hay utopía sino resurrección). PERO hay un manFaltó imaginación y buena fe dato: «SED PERFECTOS COMO MI PADRE CELESTIAL ES PERFECTO». ¡Tremendo mandato! que sirve para que nuestra aspiración a mejorar en Nuestros ideólogos democráticos del tiempo nuestro desarrollo personal lo mismo que en el de la Independencia según observa Octavio Pazpolítico y social nunca pueda detenerse (¡Cristo no tuvieron ia imaginación ni el realismo de los no deja al hombre estancarse en ningún logro!) El misioneros del siglo XVI, cuando mestizaron el cristianismo con las costumbres y mitologías pre«remordimiento» y el espíritu crítico han sido inocolombinas. No supieron salvar la ruptura de la culados por el cristianismo en nuestra historia para El mo»tiio o» horodoro Independencia continuando el proceso integrador perfeccionamiento de esa misma historia. El crisdo los troi lactoro» mestizante. (No hubo, por ejemplo, un Jacques tianismo participa y hace suya la lucha por la justihumano» gao hlcloron Maritain que rejuveneciera el Tomismo en que cia, por el bienestar, y por la liberación de los pueAmérica: ol hombro do había sido formada Hispanoamérica), Al contrablos; pero no puede sustituir con ella la superior y pipada, ol hombro do rio: cortaron la comunicación entre Tradición y trascendente empresa de la Redención. El reino de la crui y ol hombro do Modernidad y nos dejaron de herencia esa «desCristo impregna y atraviesa las liberaciones humatoaa lealtad» que nos ha costado tantas ¡ncertidumnas, manifestándose en ellas, pero sin identificarbres, ese «doble juego» de que habla Romano se con ellas. Por eso el mandato de perfección Guardinique, por un lado, rechaza la doctrina y también significa para beneficio del hombre, que el ordenamiento cristiano de la vida, y por otro reinunca debe confundirse política y religión, econovindica para sí las consecuencias humanas de esa mía y religión, sociología y religión: ¡Al César lo misma doctrina. ¡Hemos abundado, para desgraque es del César y a Dios lo que es de Dios! cia nuestra, en machetones y bárbaros tiranos Ahora, en el ocaso de las ideologías, después «defensores de la civilización cristiana!». de un largo siglo de desengaños, el TERCER Sin embargo, el siglo XX siglo sangriento de HOMBRE americano se da cuenta al repasar sus revoluciones ya en su crepúsculo alumbró de cinco siglos de historiaque la única fuerza moral pronto la más profunda e inesperada revolución: que le ha permitido mantener la dignidad humala del desengaño. Se le había dicho al hombre que nista, que ha mantenido encendida la ¡dea de podía recuperar el Paraíso en la tierra. Pero el PaDerecho y de Justicia en nuestros pueblos y les ha Siguo puoi, Quotialcéraíso debía ser custodiado por los más feroces dado resistencia contra el Poder para no bajar en oil prohibiéndonos loi policías y estar rodeado por una cortina de hierro. el corazón ía bandera de la libertad, que fa única »atrilicioi humo not; Y el hombre experimentó las leyes terribles de la llama que ha mantenido encendido el sentido crí»Igoo Fray Bartolomé nueva felicidad. Y comprendió, como dice el poetico, inclusive en el orden estético, para que el do Lo» Co»« rocordúnma, que «el infierno es un paraíso amurallado». escritor enfrente y lance sus anatemas y sátiras dono« fronto nl rona¡Por eso el símbolo del desengaño es la caída de contra los vicios sociales y políticos: es la fuerza y «imiowto dol Capital!»un muro! la llama anterior que contenía la semilla cristiana, mo quo wo ha pordldo Pero el hombre se dio cuenta también, tal vez sembrada en la evangelízaclón de América. ¡Gran un poco tarde, que la utopia del Paraíso, no sólo s»i poliqroi la riqwtin, poder remordiente el de esa semilla! era un engaño sino un peligroso virus paralizannl >o poodofl olvidar te que entumía los principales estímulos e impullo» dorocho« do la sos que mantienen activo el desarrollo, sobre Del terror al amor pobroiai todo el económico, de una civilización. La idea de Paraíso se alimenta de la idea en reposo de que Hemos tenido en América la experiencia terrible ya se llegó a la meta. Y esa pretensiosa idea de ver germinar en el vacío del amoren el vacío de redujo la producción y la creación; entumió la inila negación del amor ia mística del terror; y, sin ciativa y el progreso, matando el sueño del homembargo, al mismo tiempo y al borde de tanto bre. Económicamente la abundancia se quitó su campesino sacrificado por sus libradores, América gran túnica de propaganda y vimos la flaqueza es el único continente que ha debatido como pride su miseria. mer mandamiento de su destino histórico la preocupación y, más aún, fa opción por el pobre. ¡Lástima que una teología tan profundamente vinculada con las raíces americanas con la obra de sus misioneros y con los ideales jurídicos inicialeshaya sido desviada sin originalidad y empobrecida por teólogos mediocres, que no pasaron de ser sociólogos utópicos, que rindieron tributo al marxismo y a la violencia!.., ¡ la violencia, que no es otra cosa que la falta de fe en el amor! Es de suma importancia conocer y respetar esa dirección, es decir, el sentido en que se mueve una historia impulsada por la masa dinámica de su pasado, y esa dirección no es otra que la que nos ha lievado y nos sigue impulsando no a la cerrazón y al rechazo nacionalista, ni al odio racial, regional o de clase sino al ENCUENTRO, a la fusión de los tres mundos que componen la historia universal que son: el mundo ORIENTAL del indio, el OCCIDENTAL del español y el aporte AFRICANO. Encuentro vivo y activo que nos indica que América es la convergencia de las civilizaciones. (Vasconcelos vio en ese «encuentro» la formación de «una raza cósmica»), América y su TERCER HOMBRE que Rubén Darlo caracteriza como «sentimental, sensible, sensitivo» quiere superar (y está superando} en su literatura, en su pensamiento más Familia americana cuyos tura de cinco siglos que ha ¡do formando ese tercer miembros muestran entrañable y en su cultura, la tiranía del LOGOS personaje que se desprende de la obra cervantina diversos grados de heredada de Occidente (no hablo del Logos del ese TERCER HOMBRE: el QuijoteSancho; el mestizaje. Evangelio de San Juan, sino del racionalismo caballero escudero; el capitaltrabajo; el poesíaprocerrado, de esa razón pretensiosa cuyos sueños sa; el realismo mágico; el quetzalcóatl o pájaro serson monstruos, según Goya) y para superarlo quiepiente de los presagios indios, es decir, el mestizare aportar la otra gran potencialidad, el Amor (nuesje radical como cantaba Joaquín Pasos de tro EROS mestizo) «sobre cuya realización y floreci«un español todo indio, Lo gao ha «todo formiento dice e! escritor venezolano Guillermo y de un indio todo español»; mando nuostra histola difícil fusión del pájaro (como metáfora de espíYepes Boscán es posible pensar la cristalización de ria >n qulnionfos año» ritu) y la serpiente (como símbolo de la materia). la idea de AGAPE como comunidad no sólo biolódo fuilonoi y (onlwlogicamente sino fundamentalmente espiritual». Lo que ha estado formando nuestra historia en no», do oKportow<lai quinientos años de fusiones y confusiones, de La dirección de la historia de América es el fallidas, do Imitáronos experiencias fallidas, de imitaciones costosas y de «OTRO», es el prójimo la superación del egoís«ostosa» y do <roa<locreaciones vítales; en quinientos años de caer y mo, ¡Sigue pues, Quetzalcóatl prohibiéndonos los no» vítale»; on guinionlevantarnos, lo que se ha formado es ese tercer sacrificios humanos; sigue Fray Bartolomé de Las to» aao» do <aor Y hombre: el Cristiano americano. Casas recordándonos frente al renacimiento del lovontornos. lo quo «o En su humanismo integral, en su equilibrio del Capitalismo que no ha perdido sus peligros la ha formado o» oso torLogos y del Eros, en su valoración de la Democrariqueza, ni se pueden olvidar los derechos de la cia después de tantas frustraciones, en sus exitor hombro: ol Criitiapobreza I gencias de justicia después de tanta pobreza, hay no amontono una inmensa reserva de porvenir. Yo creo como Rubén Darío que la Civilización del tercer milenio | La tercera salida del Quijote será su obra. Y repito su verso: «¿a latina estirpe verá la gran alba futura» Considerando cuánto ha tenido de sueño y de realidad de utopía y de historia nuestra historia, una vez afirmé en un poema que América era «la Pablo Antonio Cuadra, nicaragüense, es uno de los poetas y escritores universales de la lengua española. tercera salida del Quijote». Larga salida, difícil aven