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Un año en Harvard

José M. de Areilza Carvajal

De cómo son los estudios superiores en Estados Unidos, la evaluación de su profesorado, la disponibilidad hacia los alumnos, un ambiente académico donde todo es siempre posible.

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Referencia

José M. de Areilza Carvajal, “Un año en Harvard,” accessed March 28, 2024, http://repositorio.fundacionunir.net/items/show/2152.

Dublin Core

Title

Un año en Harvard

Subject

Club de debates

Description

De cómo son los estudios superiores en Estados Unidos, la evaluación de su profesorado, la disponibilidad hacia los alumnos, un ambiente académico donde todo es siempre posible.

Creator

José M. de Areilza Carvajal

Source

Nueva Revista 015 de Política, Cultura y Arte, ISSN: 1130-0426

Publisher

Difusiones y Promociones Editoriales, S.L.

Rights

Nueva Revista de Política, Cultura y Arte, All rights reserved

Format

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Language

es

Type

text

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tar con sus grados paia determinadas funciones u oficios sociales. La Universidad acreditaba como tales a teólogos, médicos, DE LA REFORMA DEL XIX juristas y a los filósofos o «artistas» con licencia para enseñar desde gramática a filosofía y para acceder a las facultades mayores. A LA NUEVA UNIVERSIDAD De ta cuna a la primera CIENTÍFICA DEL AÑO TREINTA decadencia (MENENDEZ PELAYO, GINER DE LOS RIOS, ORTEGA Y GASSET) En el caso español, las Universidades se remontan al siglo XIII: Salamanca, y poco después Valladolid, Lérida, Huesca, etc. Por Antonio Fontán Desde entonces hasta hoy existe una cierta continuidad histórica que no ha sido nunca totalmente interrumpida. Si bien la Universidad española moderna —como las otras del continente europeo— es el resultado de una evolución más corta, que apenas si se remite a hechos anteriores a la completa —y en cierto sentido no muy afortunada— reorganización de las estructuras unima fijando en sus propios reglamentos la NIVERSITAS significa «corversitarias. producida hacia la mitad del siorganización y la disciplina de maestros y poración» en el latín de la glo XIX. Edad Media, que era la lengua escolares y disponiendo los currículos de sus de Europa cuando nacieron las facultades y escuelas. En la Edad Media, Salamanca alcanzó reUniversidades. Alfonso el SaPero las Universidades, y las demás corlativamente pronto el prestigio necesario bio lo tradujo por «ayuntamiento», emporaciones, no fueron nunca independienpara ser contada en cuarto lugar entre los pleando por primera vez en castellano un estudios universales de la cristiandad eurotes del resto de la sociedad. Por decirlo en término que luego quedaría reservado al pea, tras los ilustres nombres de París, Oxlenguaje moderno, no son ni han sido nunca ámbito municipal. La voz latina había sido ford y Bolonia. Aunque es preciso reconoentidades soberanas como los reinos, las reacuñada por Cicerón para designar bien la cer que ni Salamanca ni las otras Universipúblicas o la iglesia misma. totalidad de! género humano o del universo, dades de la Península llegaron a grabar soEn su origen hubo siempre una autoridad bien un conjunto de análoga globalidad. bre el conjunto de la vida intelectual de Eupolítica (Papa, ciudad o rey), que mediante Dos siglos después se apoderaron de ella los ropa una impronta tan profunda y duradera un acto solemne les otorgaba la condición juristas que la usaban como un tecnicismo como los grandes centros transpirenaicos de ente público, al que se reconocía la facon el mismo sentido que tiene hoy «corpomencionados. No hay que olvidar que ducultad de enseñar unos saberes y de habiliración». rante todos estos siglos España era una provincia marginal de la cristiandad europea, Cuando a principios del siglo XIII el abad marca fronteriza con el limes oceánico y con de Santa Genoveva y e! canciller de Nuestra el «otro mundo» de la cultura islámica. Señora de París reconocieron como universitas a la colectividad de los estudiantes y El esplendor de las grandes Universidamaestros del «Estudio General», había en des españolas —sobre todo de ia vieja Unila ciudad, y en todo el orbe cristiano, numeversidad de Salamanca y !a joven fundación rosas comunidades o entidades a las que se de Alcalᗠcorresponde principalmente al 1 esplendor de las daba el mismo nombre v disfrutaban de un siglo XVI. Es la época de los grandes maesgrandes Universidades sistema semejante de régimen interno. Altros de teología, derecho y lenguas, cuya regunas de ellas han conservado el título en lación ha sido repetidamente enumerada en españolas —sobre todo de la época moderna: hasta hace poco han existilos inventarios históricos de la cultura navieja Universidad de do, o todavía existen, en ciertos lugares y cional. Pero, junto con la prosperidad de Salamanca y la joven con este nombre, «Universidades» de ofilos principales centros, los reinos peninsulafundación de Alcalácios, de barrios o de distritos, territoriales, res experimentan el grave mal de la inflacorresponde principalmente etc. ción universitaria, que disemina por todo el país y con el nombre de Universidades, doal siglo XVI Por su propia naturaleza social y por su cenas de escuelas de derecho, artes y teoloconfiguración jurídica, la comunidad unigía de carácter local o conventual, a las que versitaria, igual que las otras corporaciones, una excesiva generosidad de los reyes, e intuvo desde sus inicios una vocación de autocluso unos solemnes documentos papales, nomía políticoadministrativa, o de funcioconcedían privilegios y títulos análogos a namiento interior, y de autonomía técnica: los de los grandes establecimientos. o sea, una vocación de gobernarse a sí mis