Nueva Revista 040 > Derecho a la vida y derecho a la muerte

Derecho a la vida y derecho a la muerte

José Carlos González Vázquez

Trata del libro "Derecho a la vida y derecho a la muerte"escrito por Andrés Ollero Tassara.

File: Derecho a la vida y derecho a la muerte.pdf

Referencia

José Carlos González Vázquez, “Derecho a la vida y derecho a la muerte,” accessed April 20, 2024, http://repositorio.fundacionunir.net/items/show/759.

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Title

Derecho a la vida y derecho a la muerte

Subject

Libros

Description

Trata del libro "Derecho a la vida y derecho a la muerte"escrito por Andrés Ollero Tassara.

Creator

José Carlos González Vázquez

Source

Nueva Revista 040 de Política, Cultura y Arte, ISSN: 1130-0426

Publisher

Difusiones y Promociones Editoriales, S.L.

Rights

Nueva Revista de Política, Cultura y Arte, All rights reserved

Format

document/pdf

Language

es

Type

text

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no se la trata nunca como a una persona... que fácilmente acabará llevando las de perder. Qué duda cabe que la vía adeAndrés Ollero Tassara, cuada para proteger con eficacia la Derecho a la vida y vida desde sus comienzos no pasa derecho <a la muerte por aparcar el concepto de persona Ed. Rialp para intentarlo al margen de él, sino Madrid, 1994, 125 págs. muy al contrario por extenderlo al no nacido, sin que sea obstáculo para ello el que dicho concepto constitucional de persona no coinci1 1 libro que nos proponemos da con el concepto utilizado en el I analizar presenta la rara cuaámbito civil, a su vez distinto del lidad de aunar en un mismo plasmado en el ordenamiento penal. texto concisión y profundidad de Se trata de algo a lo que los juristas pensamiento, siendo, sin duda, uno ya estamos acostumbrados: la difede los estudios más rigurosos que se rente teleología de cada sector del han realizado hasta la fecha sobre la ordenamiento jurídico comporta que jurisprudencia del Tribunal Constiun mismo concepto pueda tener distucional en torno al artículo 15 de tinto alcance en diferentes ramas del nuestra Carta Magna. mismo. Resalta el autor la incongruencia No obstante, la desafortunada jurídica que supuso establecer que STC 531985 sirvió al menos para el nasciturus esté protegido en el dejar claro que tampoco los dereartículo 15 de la Constitución, aun chos de la mujer pueden tener pricuando no permite afirmar que sea macía absoluta sobre la vida del titular de derecho fundamental nasciturus, dado que dicha preva(STC 531985), siendo protegido colência supone la desaparición, en tomo bien jurídico. Sin embargo, codo caso, de un bien no solo constitumo resalta el profesor Ollero, un cionalmente protegido, sino que enbien parece reducido equipaje para carna un valor central del ordenaabrigar a una realidad tan valiosa miento jurídico. Ello impide dentro como para merecer protección juríde nuestro sistema constitucional el dica frente a un derecho, pues los establecimiento de un sistema de derechos de un sujeto se verán conplazos, con libertad absoluta de la trapuestos a un objeto todo lo vamadre, aunque en la actualidad allioso que se quiera, o a una cosa gún grupo parlamentario de frágil por muchas vueltas que se le dé, memoria pretende la consecución de lativas más importantes desde la tal reforma legislativa. promulgación de la propia Constitución: la elaboración de un nuevo El estudio aborda también el reCódigo Penal. • José Carlos Gonverso del derecho a la vida: el derezález Vázquez. cho a la muerte y, en particular, la eventual despenalización de la eutanasia. En este sentido, comienza el autor recordando que la no prolonJean Baudouin, gación desproporcionada de la vida La philosophie politique de Karl Popper de un enfermo terminal no solo no Presses Universitaires de France está penada, sino que dicho encarniParís, 1994, 242 págs. zamiento terapéutico podría incluso ser constitutivo de un delito de coacciones. Respecto a la eutanasia en sentido estricto, resalta el peligro o es exagerado afirmar que que implican los planteamientos Karl Popper es el pensador despenalizadores de la misma, pues J más elogiado de este final en no pocas ocasiones la eutanasia de siglo. La razón, aparte de sus mésupone que una persona acaba disritos intrínsecos, es fácil de adiviponiendo de una vida ajena... suponar: desde algunos liberales semine asumir la grave responsabilidad dogmáticos hasta muchos socialdede que con ello se abra paso la posimócratas ansiosos por cubrir sus vabilidad de que acaben viéndose imcíos doctrinales, casi todo el mundo punemente eliminadas vidas humaencuentra algo de su agrado en la nas sin contar siquiera con el conobra popperiana; incluso algún cosentimiento del afectado tal y conocido exministro socialista, que mo ha sucedido en Holanda, desuele revestirse de un sesudo ropaje biendo ser el legislador especialcientificista, se reclama discípulo mente cuidadoso para no convertir del gran autor austrobritánico. Hay el eventual reconocimiento de un también mucha gente que ve con derecho a la muerte en determinadas agrado una (supuesta) confrontación circunstancias en un auténtico pelientre Hayek y Popper, acerca de cugro para la vida de quienes solo ya relación hemos de remitir al lecquieren que les dejen morir en paz. tor al notable libro de Paloma de la En conclusión, nos encontramos Nuez (del que informaba el número con una obra que puede ofrecer una anterior de NUEVA REVISTA). gran luz precisamente cuando se esJean Baudouin, profesor de tá abordando una de las obras legisCiencias Políticas en Rennes, ha pu