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Realismo empresarial y realismo sindical

José Ramón Pin Arboledas

Acerca de algunos de los principios de la psico-sociología industrial, especialmente las teorías motivacionales y los estudios de grupo, combinados con la mera filosofía empresarial, constituyen los pilares de la forma de "hacer empresa" cara al siglo XXI.

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José Ramón Pin Arboledas, “Realismo empresarial y realismo sindical,” accessed April 19, 2024, http://repositorio.fundacionunir.net/items/show/2395.

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Realismo empresarial y realismo sindical

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Panorama

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Acerca de algunos de los principios de la psico-sociología industrial, especialmente las teorías motivacionales y los estudios de grupo, combinados con la mera filosofía empresarial, constituyen los pilares de la forma de "hacer empresa" cara al siglo XXI.

Creator

José Ramón Pin Arboledas
Sandalio Gómez López-Egea

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Nueva Revista 026 de Política, Cultura y Arte, ISSN: 1130-0426

Publisher

Difusiones y Promociones Editoriales, S.L.

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Nueva Revista de Política, Cultura y Arte, All rights reserved

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es

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Los sindicatos ante el futuro desarrollo económico español Realismo empresarial y realismo sindical Por José Ramón Pin Arboledas y Sandalio Gómez LópezEgea ESDE que Mayo y sus Pero esta aportación de todos ¿Serán capaces de llegar a acuercolaboradores realizaran dos de colaboración con la exige el empleo de filosofías, de en 1927 los famosos empresa para implantar estos estilos y sistema de Dirección de experimentos de Hawthorne y programas como lo hace la Recursos Humanos acordes con descubrieran la importancia de la «Unión de Trabajadores del el fomento de la coinformación, motivación individual y la Automóvil» americana afiliada a la participación y en algunos dimensión social del grupo como la AFLCIO? casos, la codecisión de todos los elemento clave en la productiviniveles de la empresa. Los planteamientos de UGT dad, ha llovido mucho. Fue el iniAlgunos de los principios de en SEAT, o las reticencias del cio de la revolución social en la psicosociología industrial, especomité de empresa de General empresa. Ya entonces, el siglo Motors, cara a incluir este tipo de cialmente las teorías motivacioXX empezaba a preguntarse si Algunos de los principios de cuestiones en el convenio, son fiales y los estudios de grupo, las normas básicas de la escuela indicios de la falta de conciencia psicosoctología industrial, descubiertos a partir de Hawthorclásica de la organización eran de la situación real de la empresa ne, combinados con la mera filoespecialmente las teorías suficientes para la era industrial. por pane de los sindicatos espasofía empresarial constituyen los motlvacionales y los ñoles. pilares de la forma de «hacer Menos ha llovido, pero más estudios de grupo, empresa» cara al siglo XXI. intensamente desde que Peter y El sindicalismo español sabe combinados con la mera Watermans escribieron su céleque estos nuevos sistemas, estilo bre libro «En busca de la excey filosofía premian el mérito indifilosofía empresarial lencia», a principios de los años vidual y la colaboración con la Nuevos modelos de constituyen los pilares de la setenta. Los cambios operados en empresa y puede suponer una forma de «hacer empresa» empresa la estructura económica mundial pérdida de su protagonismo. cara al siglo XXI han sido espectaculares. La gloSabe también que eso supone un balización y la internalización cambio de mentalidad en el España no es ajena a este del comercio, y la aparición de empleado y abre paso a una polímovimiento. Tanto los empresanuevas economías pujantes, han tica de participación responsable. rios autóctonos como las multipuesto sobre el tapete la necesiPor otra parte, este cambio nacionales instaladas en nuestro dad de una nueva forma de entenjunto con la robotización e inforpaís han comprendido la necesider lo que es la empresa, para matización supone la aparición dad de los cambios, y están dispoder competir en lo que los de especialistas. Empleados puestos a ponerlos en marcha. expertos han definido como «los poseedores de habilidades espeSon ejemplo de ello; El orgutiempos turbulentos», caractericíficas capaces de «negociar» llo de peitenecer a una empresa zados por el cambio acelerado individual o colectivamente sus puntera del empleado del «Corte Un cambio acelerado, que exicondiciones laborales. El mercaInglés», donde no han arraigado ge gran capacidad de adaptación do de trabajo único ha pasado a los sindicatos de clase, y los por parte de la empresa. Capaciser «Los mercados de Trabajo», a intentos de poner en marcha los dad de adaptación que sólo es veces tan estancos entre sí que es programas de «Calidad de Vida posible si se consigue la aportacompatible una alta tasa de paro Laboral» de General Motors en ción de todos los empleados de la con la incapacidad de encontrar su planta de Zaragoza, o la introcompañía. empleados para puestos específiducción del trabajo en equipo de cos o para sectores laborales la nueva planta de Martorell de No se trata de grandes y brusenteros. SEATVOLSKWAGEN, ambos cos cambios, sino de pequeños con fuerte implantación sindical. microcambios, que permitan Estos hechos están dando lugar mantener la constante mejora de ¿Pero están los sindicatos a su vez, a la organización de un la calidad y reducción de costes, españoles preparados para adapasociacionismo sindical específicara al servicio al cliente. tarse a esta nueva empresa? co, el sindicato sectorial en ramas ñol, se caracterizan por determinados planteamientos, contrarios a «signo de los tiempos», es decir a esta evolución que acabamos de describir. Frente a esta tendencia de sectorialización de la sociedad laboral, las grandes centrales siguen intentando planteamientos globales. Soluciones generales, que descontentan a muchos (los especialistas) cada ve¿ más y desconciertan al resto, que contempla un sindicalismo de maneras trasnochadas. Además el planteamiento globalizante los hace adoptar el papel de «Parapartidos», actuando en la sociedad como fuerzas de naturaleza más política que profesional. Con ello, intentan justificar tanto su existencia como las generosas subvenciones que reciben con cargo a ¡os Presupuestos Generales del Estado. Unos presupuestos, que les asegura la supervivencia, independientemente de las aportaciones económicas de la base sindical. Por tanto, los aleja de ellas y convierte a sus dirigentes en parte de la acomodada superestructura del Estado. Otra característica es el sucesivo desplazamiento del activismo sindical del sector privado a¡ público. Las empresas privadas son cada vez más capaces de gestionar directamente las inquietudes de sus empleados. Se trata de producir mejor y a costo competitivo. pero respondiendo a las necesidades de desarrollo profesional de todas las personas. El sector público, menos ágil, más pesado, no ha descubierto hasta hace poco la necesidad dei cambio y aún no hay suficiente investigación real sobre cómo hacerlo dentro de las específicas características del mismo. El sindicalisGestos y actitudes de otros mo «de clase» encuentra en este de actividad económica, que se Ante este doble fenómeno, tiempos permanecen en el sector un campo abonado para el descuelgan de la política sindica) que descuelga al sindicato de su sindicalismo español. empleo de los viejos planteade las grandes centrales. CCOO y base naiural de trabajo (el centro mientos y técnicas de activismo. UGT, buscando una nueva repreproductivo), las centrales clásicas sentación que les defienda bien sus no tienen más remedio que renoEn estas «antiguas» técnicas, problemas. Son ejemplos el sindivarse e innovar sus planteamienla confrontación casi exclusivacalismo pujante de los funcionatos, estilos y modos, mente por motivos salariales, es rios (CSICSIF) o de los especiaPero la actualidad nos está una de las formas típicas de actilistas. como el de los técnicos de mostrando una cara distinta. Las vismo. Así lo han demostrado las mantenimiento o ¡os de controlareacciones, que todo ciudadano recientes huelgas de la E.M.T. dores de vuelo de Iberia, etc. observa en el sindicalismo espamadrileña, o la de recogida de Gobierno, ante la atenta, pero lejana, mirada de los empresarios, como si con ellos no fuera la cosa. El diálogo directo entre los sindicatos y los empresarios parece que ha pasado a mejor vida, cuando debería ser la base del entendimiento a nivel nacional que impidiera alcanzar las cotas de crispación actuales. Mientras tanto en las empresas se siguen negociando los convenios, y por tanto, dando solución a todos los problemas que se presentan. con mayor o menor dificultad. ¿Será por esa razón por la que el gobierno pretende trasladar a nivel de empresa la resolución de los problemas que no encuentran salida en las alturas? Debemos esforzarnos para construir un nuevo modelo de relaciones laborales. ¿Cuántas veces hemos oído esta cantinela? Pero es verdad. Necesitamos relanzar una negociación entre los interlocutores sociales, olvidándonos del papá Estado, y partiendo de un análisis exhaustivo de las que cada una de las panes apone soluciones constructivas en vez de realizar un continuo ejercicio de rasgarse las vestiduras y mantener a ultranza todo lo anterior. La Hay que pasar de la confrontación basuras, Pero la sociedad está empresa exige un continuo dinagógica del interés del sindicato, al diálogo realista. cada vez menos dispuesta a mismo si quiere perdurar en el estos servicios no dejan de ser un soportarla en aquello que se refiereclamo, que se pueden encontrar tiempo con garantías de éxito. re al servicio público. Frente al en otras instituciones. Los sindicatos en plena crisis uso y abuso del derecho del trabaLa crisis de identidad sindical de identidad y de afiliación, en jador se plantea el del usuario o está servida si el sindicalismo vez de huir hacia adelante busconsumidores que, por cierto, español no redescubre su naturacando su fuerza en convertirse en pagan estos servicios a través de leza y su verdadero campo de pane de la superestructura estatal una presión fiscal no desdeñable. acción: la defensa de intereses a toda costa, han de ser capaces reales de los empleados dentro de adaptarse a la realidad de los Las reacciones, que todo del centro de trabajo. Una polítiaños que vivimos con unas ciudadano observa en el ca sectorializada para ios distindemandas sociales muy distintas Crisis de identidad sindicalismo español, se tos sectores laborales y una polía las tradicionales y con unas caracterizan por tica de participación responsable posturas más proclives a consdentro de la empresa que permita Ante la necesidad de buscar determinados truir que a oponerse a todo. V su desarrollo armónico. unas nuevas señas de identidad, sobre todo deben ser capaces de planteamientos, contrarios algunas cúpulas sindicales intenPara ello las cúpulas dirigenencontrar de nuevo a su interloal «signo de los tiempos», tan convertirse en un núcleo de tes sindicales y sus asesores cutor social por antonomasia, el es decir a esta evolución servicios. Las inmobiliarias, coodeberían estudiar las tendencias empresario, con el que antes o perativas de vivienda, agencias modernas de la organización que acabamos de describir después tendrán que negociar ei de seguros y viajes, clubs de empresarial, las experiencias de presente y el futuro de las relavacaciones... son manifestaciocolaboración realizadas con éxito ciones laborales, • nes de ello, Pero plantearse el y adoptar sus estrategias en funfuturo y la existencia del sindicación de eilo. José Ramón Pin Arboledas es profesor lismo basándose en este tipo En cambio, en el panorama (le Comportamiento Humano del 1ESE. colateral de actividad no deja de español actual, podemos contemS. Gómez LópezF.gea es titular de la Cátedra .SEAT I (ESE de Relaciones Laser una autojustificación. Sin la plar un enfrentamiento casi a borales. defensa real, no utópica ni demamuerte de los sindicatos con el