Nueva Revista 065 > El emperador del aire

El emperador del aire

Pablo Echart

Reseña del libro "El emperador del aire" de Ethan Canin.

File: El emperador del aire.pdf

Referencia

Pablo Echart, “El emperador del aire,” accessed November 22, 2024, http://repositorio.fundacionunir.net/items/show/1420.

Dublin Core

Title

El emperador del aire

Subject

Libros

Description

Reseña del libro "El emperador del aire" de Ethan Canin.

Creator

Pablo Echart

Source

Nueva Revista 065 de Política, Cultura y Arte, ISSN: 1130-0426

Publisher

Difusiones y Promociones Editoriales, S.L.

Rights

Nueva Revista de Política, Cultura y Arte, All rights reserved

Format

document/pdf

Language

es

Type

text

Document Item Type Metadata

Text

EL EMPERADOR DEL AIRE Ethan Canin Emecé 1999 205 páginas Hace diez años, Ethan Canin (Miexperimenta el americano adulto chigan, 1960) se convirtió en una de —sobre todo el varón— a la hora de las grandes promesas de las letras adaptarse a los modos actuales de estadounidenses al publicar su privida y a las instituciones sobre las que mer volumen de cuentos. La colectradicionalmente ha descansado la ción, traducida al castellano inicialvida en sociedad, muy en especial mente como El emperador celeste sobre el matrimonio y la familia. (Versal), ha sido felizmente reeditaDada la ingente cantidad de autoda ahora con un título ligeramenres que transitan por estas latitudes, te distinto, El emperador del aire cabría preguntarse si no se trata de (Emecé). Entretanto, Canin ha conotro autor mimético, atrapado como firmado su talento con la novela Blue tantos en las voces de los Updike, River (Emecé) y muy especialmente Ford o Carver. Felizmente, Canin ha con El ladrón de palacio (Anagrama), encontrado una mirada personal conjunto magistral de cuatro relatos sobre el incómodo estado de las largos que suponen la entrega más cosas, misterioso e insondable al destacada del autor hasta la fecha. mismo tiempo, como lo es la naturaleza de cada hombre. Ahí es adonde Canin, desde esta su primera apunta Canin, a la incapacidad de obra, muestra afinidad con esa pródilos miembros de una determinada ga corriente narrativa estadounidensociedad —fácilmente reconocible— se de corte realista que, en esta segunpara establecer vínculos estrechos da mitad de siglo, ha inquirido en la entre ellos a pesar de los años y del insatisfacción del individuo de clase parentesco, a la imposibilidad, en media acomodada, en el malestar que rrados que marcan la vida cotidiana, definitiva, de ser reconocido por los hechos asumidos que, sin embargo, otros, incluso por los más cercanos. despiertan inconscientemente la Los personajes de El emperador del necesidad de explicarse uno mismo, aire se han acostumbrado a vivir en de repasar la propia historia, de presoledad, son fríos, indolentes, parcos guntarse qué se ha hecho de la vida, en palabras. Canin se muestra fascisi queda entre tanto paso en falso nado por la relación de los padres y los algún minúsculo hecho heroico que hijos, por la enclenque herencia que la redima. se transmite de unos a otros, por los extraños y en apariencia minúsculos Los lectores de El ladrón de palacio desequilibrios del comportamiento echarán de menos en este libro de inique padecen, válvulas de escape que ciación la caricatura, la incursión de liberan las presiones familiares y personajes tan queridos como ridícusociales, y que facilitan la adaptación los en las situaciones más disparataal grupo. Salvo en el primero de los das. Sin embargo, cualquier lector cuentos, Canin evita la empatia del advertirá la genialidad de Canin para lector con los protagonistas, los mancrear expectativas, para jugar con las tiene aislados, no conoce todavía —a metáforas y para deslumbrar con los juzgar por lo mostrado en el posterior finales. Y, por supuesto, para crear El ladrón de palado— la calidez de lo atmósferas inquietantes y desarrollar cómico, la redentora intervención personajes. Sobre un fondo gris, lacódel humor. nico, sosegado, una tormenta de hielo se cierne sobre criaturas «razonableUn velado examen de concienmente felices», hombres maduros, cia parece recorrer el interior de capaces siempre de controlar sus senestos personajes. La vejez, la infidetimientos. lidad, la enfermedad, la muerte de un padre: son acontecimientos sotepablo echart