La Guerra del Rif, el otro 98

La Guerra del Rif, el otro 98

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Reseña literaria de "La guerre du Rif. Histoire et perspectives Mediterranéennes" por Germain Ayache.

Victor Morales Lezcano

Nueva Revista 054 de Política, Cultura y Arte, ISSN: 1130-0426

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La influencia de la luz en la vida Germain Ayache (19151990), profeconstituye el tema de un tercer capítusor de Historia en la Facultad de Lelo. Las relaciones entre luz y vida fuetras y Ciencias Humanas de la Uniron estudiadas ya por los griegos, hace versidad Mohamed V (Rabat), ha pamás de 3.000 años. Actualmente se ha sado a mejor vida hace ya unos años. constituido una ciencia, la FotobioloCoincidiendo con el triste evento, gía, que se ocupa de estas relaciones. comenté a algunos amigos iniciados El estudio de la naturaleza de la la obligación que la historiografía esluz no es, ni mucho menos, un propañola tenía con el profesor Ayache, blema teórico solamente. Abarca nuuna vez que la visita de la vieja dama merosas aplicaciones y da lugar a discumplió con él la cita ineludible que tintas tecnologías. En su estudio han con ella tenemos contraída todos. tomado parte los físicos más brillantes La requisitoria académica cayó en de la Historia: Newton, Maxwell, el vacío, que yo sepa. No ha habido Hertz, Einstein, etc. La luz, sin emeditor que acometa la publicación en bargo, sigue ocultando y presentando castellano de sus dos o tres obras clamuchas incógnitas. Alberto Miguel ve, muy en particular Les Origines de Arruti. la Guerre du A(ParísRabat, SMER, 1981). El silencio denso que rodea el nombre y la obra de Germain Ayache, en España, no es justo. O a mí La Guerra del Rif: así me lo parece. La publicación en Francia del mael otro 98 nuscrito de su monografía La Guerre du Rif— al cuidado de su hija EvelyneGermain Ayache Myriam Ayache es un acontecimienLa Guerre du Rif to que, esta vez, no ha de quedar siHistoire et Perspectives lenciado, al menos por mi parte. No Méditerranéennes solo porque Ayache fue un historiaLHarmattan dor de calidad, detector de coyuntuParís, 1996 ras críticas en la Historia del Marruecos contemporáneo (18801956), sino porque, además, me unió a él una afinidad de talante y empatia profeo quisiera que estas líneas causaran en el lector la imsional. De tal modo que lo que es de presión de que me ha moviNjusticia es, también en este caso, trido a redactarlas un sentimiento fúnebuto amistoso siquiera sea postubre. El caso es que la gente se muere y mo—. La idea neurálgica que desarrolló Ya en Les Origines... sin lugar a Ayache en Les Origines... fue la de que dudas, la obra maestra de Ayache, el el conflicto armado entre las tribus autor comenzó por plantear la necesidel Rif y las potencias coloniales hedad de una revisión a fondo de la guegemônicas en el norte de África, a rra que enfrentó a los ejércitos coloprincipios de siglo, solo es racionalniales de España (y más tarde de Franmente explicable si se entiende la concia) con las milicias, primero, y el ejérjunción de tres factores concomitancito, después de 1921, de tropas rifetes que se solaparon hacia 191920: ñas que logró coagular bélicamente a) la pervivencia de un irredentisMohamed ben Abdelkrim. mo local en el Rif y en algunos otros Ayache puso en solfa, en su priterritorios del norte de África (Kabilia mer libro, las interpretaciones triunfaargelina, por ejemplo), de raigambre listas de las crónicas y la publicística bereber; militar y civil que se publicaron en b) la aparición de un foco guerriEspaña y Francia durante y después llero irreductible (tribu de los Beni de terminada la Guerra del Rif. DesUrriáguel), desde el punto de vista escartó, también, las interpretaciones y tratégico y logístico dirigido por el enfoques internacionalistas (Walter círculo familiar de la familia Krim; Harris) y de linaje antropológico (Roc) el surgimiento de la figura de Si bert Montagne). Y no dejó títere con Mohamed ben Abdelkrim, no sin sucabeza al refutar algunas tesis marroperar dificultades morales, materiales quíes, de nacionalismo estrecho (Ayay de suerte diversa que le llevaron, chi, Ameziane). No tiene nada de exdesde la colaboración con las autoritraño que esta apertura de frentes dades militares españolas en la co(valga este lenguaje, puesto que de mandancia de Melilla, hasta el enguerra se está hablando aquí y ahora) frentamiento armado del 1 de junio situara al profesor Ayache en un eje de 1921 (Abarrán), para culminar en profesional de coordenadas incómodo la derrota de Annual (21 de julio del dentro de la historiografía francesa y mismo año). de los cotarros domésticos de MaLa Guerra del Rif habría sido, en rruecos. En España no hubo sino sila visión de Ayache, una manifestalencio, tal es el espíritu avestrucista ción de patriotismo lentamente gestade algunos colegas y hasta tal grado do, en la que se interpenetraron los de cerrazón interpretativa se ha ido habitantes de las tribus y los jefes resencerrando la opinión pública napectivos bajo la supervisión un tanto cional en lo concerniente a los temas improvisada, hecha de experiencia sode Marruecos. bre la marcha de Abdelkrim. nado en Annual y los aledaños, contra Cierto es que, en algunos pasajes, todo cálculo por parte del Estado Mala ideología del profesor Ayache asoma yor de la incipiente República del Rif); la punta de la oreja, pero soy de los para sondear los factores objetivos y los que creen en que, si se respetan las personales, subjetivos, de los personapautas documentales y críticas del cojes responsables de las decisiones que nocimiento y el oficio históricos, es líles llevan al fracaso (General Silvestre), cito que la levadura de la ideología ina la victoria (Abdelkrim), a la ambisufle prudentemente el relato que güedad oportunista (El Raisuni) o calconstruye el historiador. Y si el fenóculada (Lyautey); para sugerir lecturas meno de la compenetración paulatina renovadoras de acontecimientos que la entre los líderes y las gentes que les sitradición interesada ha fijado por muguen parece algo sublimada en Les cho tiempo (interpretación crítica que Origines..., el lector que sepa discernir practica Ayache del repertorio docuse quedará con el fruto más logrado de mental hispanofrancés). las páginas de Ayache y apartará aquellos pasajes en los que un coeficiente En este segundo libro, Ayache reideológico (marxista) irrumpa con decupera el desastre de Annual y sus satino. Lo que raras veces se produce secuelas en España, sus inesperadas en la escritura de Ayache, dicho sea de consecuencias en el Rif y la consipaso. guiente formación de un protoEstado rifeño (entre 192326) a partir del cual Me parece obligado recordar al lechacer frente a la contraofensiva colotor que esta segunda monografía es la nial (BerenguerPrimo de Riveraedición incompleta de la guerra del Rif LyauteyPétain). en puridad. Que, por tanto, la muerte El libro queda interrupto a esta aldel autor en 1990 dejó pendiente de tura, privándonos del fin del relato y acabar su redacción y que, a pesar de del sobo postrero que el autor, latodo el respeto que puedo imaginarme mentablemente, no pudo propiciarle de la editorial LHarmattan, la transpor su desaparición. cripción del texto original no ha podido experimentar los beneficios de la reQuizá falte en esta segunda parte la visión (el sobo, como gustaba decir densidad documental que posee la priOrtega) por el propio Ayache. mera; quizá el lector no se vea ya tan No obstante, el lector encontrará sorprendido por el estilo y las técnicas en esta monografía la misma capacidad de Ayache, ni por la originalidad de su sensible del gran historiador para planplanteamiento, hecho desde una mentear cuestiones nuevas (por ejemplo, talidad distinta a la normativa al uso. sopesar el factor sorpresivo que supuso Sin embargo, La guerre du Rif sila retirada del ejército español estaciogue siendo una contribución de eneconomicus abstracto y atomatizado jundia al esclarecimiento de las relaque utiliza la economía hay que enciones euromagrebíes, en particular frentar el homo sociologicus. Son muhispanomarroquíes. O sea, a uno de chas las reducciones empobrecedoras los capítulos más opacos de la historia que hay que transformar. La motivade las relaciones internacionales entre ción humana no puede igualarse al revecinos territoriales y marítimos de la sumèn de las preferencias egoístas e cuenca del Mediterráneo occidental. interesadas; existen también las deciVíctor Morales Lezcano. siones colectivas y nolucrativas. Junto a la razón calculadora, hay que inteUna propuesta grar la imaginación y la afectividad prudencial; junto al afán de dominio, moral alternativa la coexistencia y la cooperación; junto al beneficio maximalista, la solidariJosé Pérez Adán dad. Se trata de un cambio de paraSocioeconomía digma de la racionalidad económica Trotta que quiere hacer más justicia a la realiMadrid, 1997, 121 págs. dad. La libertad del individuo económico es una abstracción cuyas consecuencias lógicas (en la dirección política) son el desmembramiento de la soresentamos aquí el primer libro ciedad, el crecimiento de la desigualen español de lo que es ya de dad (la acumulación de poder) y la exPhecho una nueva disciplina en plotación de la naturaleza. La socioeAmérica, la Socioeconomía. Prologaconomía como nueva sensibilidad se do por su fundador, Amitai Etzioni, el apunta a todas las protestas postcapilibrito posee el mérito de introducir talistas: el ecologismo, el globalismo, de manera sucinta no solo lo que tenel feminismo y el antiestatalismo endrá un espacio en la academia como tran por la puerta grande y tienen su área curricular, sino también una nuelugar como denuncias disfuncionales va políticaeconomía que se ve a sí producidas por la homogeneización misma como alternativa entre el neolide los valores economicistas. beralismo y el socialismo intervencionista. El núcleo central de la socioeconoLa Socioeconomía como materia mía lo posee el trabajo como valor inteórica viene a llamar la atención sotrínseco en sí mismo. Adán hace un bre las limitaciones de la metodología recorrido sobre el concepto de trabajo neoclásica que actualmente impera en desde los albores de nuestra civililos ámbitos universitarios. Al homo zación con una brevedad tan arriesga