La opción fundamental de España

La opción fundamental de España

Panorama

Sobre el pragmatismo que representó a los fundamentos ideales y civilizadores de Europa y España tras la Segunda Guerra Mundia. El esfuerzo de España por salir de la decadencia.

Javier Gomá

Nueva Revista 050 de Política, Cultura y Arte, ISSN: 1130-0426

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La opción fundamental de España El pragmatismo permitió echar los cimientos de la nueva Europa tras las ruinas de la Segunda Guerra Mundial, así como reconciliar las dos Espanas durante la transición a la democracia. Este pragmatismo representó una especie de compromiso dilatorio respecto a los fundamentos ideales y civilizadores de Europa y España, que no era conveniente debatir por el momento. Pues bien, ha llegado la hora: estamos ante nuestra opción fundamental. constituyó un Estado ni consiguió España no ha tenido ni feudacrear las condiciones de un mercalismo ni burguesía, dijo Sánchez do libre y competitivo; no hizo la Albornoz en célebre sentencia. Esrevolución hacia la modernidad copaña guerreó siete siglos de reconmo Inglaterra, Francia o Italia, sino quista, y en el comienzo de la edad la Guerra Civil fratricida. La Iglesia moderna, en lugar de construir la católica, la Inquisición, privaron a nación burguesa, próspera y rica en España se dice de una ciencia bienes, siguió conquistando remomoderna libre de prejuicios. La emtas tierras de América y porfió en presa caballeresca de una España Europa en la anacrónica idea de Imsupranacional y americana fue un perio. Mientras Europa preparaba mal sueño que se debe a la ausencia los fundamentos económicos y pode la auténtica empresa moderna, la líticos de la modernidad, España en empresa de capital y trabajo. En Esel siglo XVIII contenía los muros de paña no existe el tipo del burgués un bastión medieval que se desmoque tan bien retrató Sombart en su ronaba. Europa se despojó de la tifamoso libro de 1913: asceta, racioranía de las confesiones religiosas y nal, virtuoso, dominado por un anerigió su autonomía sobre la raciohelo de lucro incesante. El catolinalidad pública y sobre el dogma cismo nos arrebató el ethos protesdel mercado: la alianza de ambos tante y la moral de los negocios. generaba imparable progreso, riLos españoles perdimos las dos queza, bienestar, libertad y justicia. grandes industrializaciones europeas En cambio, España expulsó a los de los siglos xvii y XVIII. Y en el tejudíos, fermento de burguesía; no rreno cultural, España no ha tenido del todo punto conveniente y un raIlustración, Ortega y Gasset dixit. cimo de connotaciones apoya esta Una culpable minoría de edad inteproposición: la España antimoderna lectual nos convierte en pasto de o premoderna se moderniza al final, supersticiones, folclore, mitologías. se desprende del estigma de espeLa especialidad de España es la decialidad y es admitida en una comucadencia de España. Hay que euronidad que durante centurias se repeizar España. servó el derecho de admisión. Superamos una antigua decadencia. Mientras tanto, Europa ha mudado su primera estampa. La EuroAhora bien, el club de Europa pa moderna, la Europa de la razón se asienta hoy sobre un camposantécnicacientífica, la Europa de las to. Quiere decirse que los cincuenta luces y del progreso, se transfiguró millones de muertos de la segunda de pronto en el teatro de las guerras Guerra Mundial proscribían una exmundiales, el laboratorio científico cesiva ideología en el levantamienen cámaras de gas, el jardín renato de los planos de la nueva Europa. centista en el campo de Auschwitz. Una vez disipado el humo de las Todo el pensamiento contemporábombas asesinas, arraigó en Europa neo se resume en una crítica de la un anhelo hondo de paz perpetua. modernidad: detrás de la razón Lo mejor era evitar las controvercientíficotécnica se descubre vosias ideológicas y crear una solidaluntad de dominio sobre la naturaridad de hecho. En cierto sentido, leza y el hombre, se desenmascara como ha explicado Joseph Weiler, la irracionalidad y la noche del esla Comunidad Europea pretendió píritu; la Filosofía de la Historia es no tener ideología y profesar una la historia del dolor y de las víctipragmática neutralidad en este punmas inmoladas en el altar del proto. Pero la ausencia de ideología o greso. La modernidad naufraga en su estudiada neutralidad aseguraba las riberas de la postmodernidad. también de hecho el triunfo de la ideología dominante, que se impone ¿Qué es España, qué debe ser? donde nadie la contradice. Por ello En trance de sumarse a la proclala Unión Europea consagra el ídolo mada integración europea, la opidel Mercado y la ideología que lo nión pública española siente la presostiene. Mercado Único quiere desión de una tremenda inercia genecir que todo es mercado, nada fuera rada por la ortodoxia de las autoridel mercado, mercado como orbe. dades públicas de todo signo. ¿DeJustamente la modernidad se caracbe España esforzarse por entrar en teriza por la transformación de todo la Unión Europea? Se dice que es cultura, razón, deseo, arte en se fundó la modernidad (Historia mercancía. La mercancía es el omcrítica del pensamiento español, tobligo de la modernidad y la Unión mo i, pág.124) Europea su emanación postrimera. Por otra parte, la prestigiosa revista The Economist, en su número Nuevamente pregunto: ¿qué es del 14 de diciembre de 1996, dediEspaña y qué deber ser? Hay quien có varios artículos a España. El proclama: La Modernidad ha principal de ellos, titulado In tranmuerto. ¡Viva España!. La España sit, trata de demostrar que ciudapremoderna o antimoderna que Eudes como Madrid o Barcelona maropa menospreció, por no plegarse nifiestan lo mucho que España se a su hechura, se transmuta en la Esha modernizado en los último años; paña postmoderna que adviene desya nada tiene que envidiar a Europués de la decadencia de la moderpa. En efecto, las mujeres tienen nidad. Porque ¿quién decae? José un papel más importante que antes, Luis Abellán cree que la decadencia la Iglesia y el ejército importan mede Europa origina la reviviscencia nos. Pitan por todas partes los teléde España: Si esta línea histórica fonos móviles. La familia todavía de crítica a los valores modernos se cuenta, pero en España está empeprolonga, ello traerá evidentemente zando a ceder a las reclamaciones más aún, está trayendo ya una del individuo. Padres solteros, dinueva escala de valores según la vorcio, contracepción, homosexuacual España no solo no aparecerá lidad, abuso de drogas y SIDA, algo decadente, sino que no habrá decaíinaudito y ampliamente censurado do realmente, pues aparecerá como en los días de Franco, han venido a una nación que mantuvo en su día ser una cosa corriente. En suma, unos valores que tras un periodo España ha llegado a ser un país eude depresión han vuelto a prevaleropeo considerablemente normal. cer. España durante su llamada decadencia no habría hecho sino espeEs un extracto casi cómico y no rar su hora realmente, y esa decadeseo sacar conclusiones que sacien dencia no aparecerá como tal, sino el apetito de reaccionarios golosos. como una disidencia respecto de los Nadie pretende, ni siquiera la revisvalores triunfantes un día en los ta británica, que esas conductas sean otros países, que habrían al cabo del los bienes exclusivos de la cornucotiempo venido a darle la razón. En pia moderna ni que España arribe a cualquier caso, lo que no cabe duda la modernidad por el aumento de que está en nuestra mano es intentar las víctimas de la droga o del SIDA. cambiar la escala de valores en que Ahora bien, del mismo modo que la piación por el franquismo de los supuesta neutralidad ideológica de símbolos unitarios de nuestra nación la Comunidad Europea sustrajo al ha forzado un pragmatismo sin símgran público el debate sobre su bolos ni tradición. Pero nuevamente esencia y fines, así también una pael pragmatismo esconde una ideoloreja sustracción se ha producido en gía que no se ha hecho consciente. nuestro foro. La ingenuidad implica heteroUrge un debate nacional. El tácinomia, una como cesión de soberato convenio de no hacer ideología nía. La integración europea y nuesdurante la Transición española destra participación en ella representa de 1975 a fin de conciliar la divilo que los moralistas llaman una sión de las dos Españas permitió, opción fundamental, una determien España como en Europa, una nación última y definitiva sobre el cierta paz social y el ahondamiento propio ser, que involucra toda su de algunas instituciones capitales. historia pasada y futura. Nos parePero de reflejo ha producido que nacemos a ésos que dormían mientras die plantee hoy qué sea nuestra namataban al anhelado Mesías. No se ción ni qué deba ser. La Constitutrata de desviar el curso de los ción fue un compromiso dilatorio tiempos, sino de abrir los ojos. Destambién en este punto. Solo las repojémonos del pragmatismo majagiones históricas gozan del priviledero y levantemos el pensamiento a gio de suscitar la gran cuestión y cosas mayores. Javier Gomá. atraer la atención general. La apro