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El rayo tecnológico no cesa

José Luis Angoso; Eugenio Fontán

Cada vez hay más personas que recurren a Internet: para informarse. Un ejemplo pionero de esta actividad nos lo ofrece EEUU, donde la información online sobre temas relacionados con el Gobierno ha aumentado un 70% en los últimos dos años.

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Referencia

José Luis Angoso; Eugenio Fontán , “El rayo tecnológico no cesa,” accessed November 22, 2024, http://repositorio.fundacionunir.net/items/show/45.

Dublin Core

Title

El rayo tecnológico no cesa

Subject

Nueva economía y nueva política

Description

Cada vez hay más personas que recurren a Internet: para informarse. Un ejemplo pionero de esta actividad nos lo ofrece EEUU, donde la información online sobre temas relacionados con el Gobierno ha aumentado un 70% en los últimos dos años.

Creator

José Luis Angoso; Eugenio Fontán

Source

Nueva Revista 087 de Política, Cultura y Arte, ISSN: 1130-0426

Publisher

Difusiones y Promociones Editoriales, S.L.

Rights

Nueva Revista de Política, Cultura y Arte, All rights reserved

Format

document/pdf

Language

es

Type

text

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NUEVA ECONOMIA, NUEVA POLÍTICA El rayo tecnológico no cesa Egovernment: la nueva Administración por JOSÉ LUIS AfIGOSO ada vez hay más personas que recurren a Internet: para informarse CO hacer gestiones administrativas —cada vez hay más ciudadanos internautas—. Por eso los organismos de las Administraciones locales y centrales están mejorando sus sitios web, en los que cada día se ofrece más y mejor organizada información, para que sus servicios sean accesibles a través de ¡a red. Este concepto ha sido definido internacionalmente corno eGovèmmeni. Un ejemplo pionero de esta actividad nos lo ofrece Estados Unidos, donde la información onAine sobre temas relacionados con el Gobierno ha aumentado un 70% en los últimos dos años, según un estudio de Pew y American Life. Para la consultora Accenture este crecimiento tiene su origen en la creciente sensibilidad de las agencias gubernamentales de todo el mundo hacia los beneficios que proporciona la tecnología y que les permite racionalizar los procesos burocráticos, optimizai la ejecución de los proyectos y una mayor facilidad para poner en marcha servicios centrales estatales. Algunos de los países que mejor han entendido esta situación ya cuentan con amplias infraestructuras de eGoimimeni, como sucede en Canadá que, según un estudio realizado también por la consultora Accenture en veintitrés Estados sobre las categorías de servicios eGovemment más solicitados por ciudadanos y empresas, se situaría entre los diez primeros en servicios virtuales de atención a los ciudadanos. Otros países que también han entendido las virtualidades de las nuevas tecnologías aplicadas a la Administración son algunos tan diversos como Singapur, Australia, Dinamarca, Reino Unido, Finlandia, HongKong, Alemania o Irlanda. Los servicios más demandados son —por orden decreciente—: los sociales (seguridad social, asistencia social, pensiones), impuestos, servicios postales, servicios educativos, justicia, seguridad pública e información sobre derechos constitucionales y democráticos. Aunque cada uno de los países que ha sido objeto de ese estudio ofrece servicios online en todas o la mayoría de las categorías arriba mencionadas, ninguno ofrece todavía todos sus servicios por medio de las nuevas tecnologías. La canadiense es ejemplo de una Administración que ha entendido cómo «el mayor uso de las opciones de autoservicio permite a los gobiernos ofrecer un mejor servicio, sin necesidad de dedicarles más recursos» y que, por ello, se está preparando para proporcionar dentro de un año acceso a todos los servicios estatales a través de la red. Esta nueva oferta permitirá la conexión a los programas y servicios de la Administración central de Canadá veinticuatro horas al día, siete días a la semana. El estudio elaborado por Pew y American Life subraya la importancia de este último aspecto —disponibilidad permanente de la información—, y aconseja el traslado de todos los servicios y programas estatales a los sitios <web, «ya que los usuarios de este sistema informaron que las gestiones con la Administración a través de las web gubernamentales ha mejorado su interacción con todos los organismos estatales». En España, hemos conocido en los últimos años una rápida evolución general, gracias a la cual los ciudadanos disponen en la actualidad de nuevos servicios públicos online, que se han sumado a los disponibles desde hace tiempo, como los de la Administración Tributaria o la Tesorería General de la Seguridad Social. Estos, que se cuentan entre los más relevantes y reconocidos internacionalmente de nuestra Administración central, se han unido a los que, con notable celeridad, han sido implantados en la mayoría de las comunidades autónomas y administraciones locales. Por ello, han de ser saludadas como enriquecedoras todas las iniciativas que apoyen esta evolución de la red hacia un eGoverriment que llegará a transformar la relación de los gobiernos con los ciudadanos, incluso con aquellas partes de la sociedad más vulnerables y marginales. Es la oportunidad del «siempre disponible» frente al modelo clásico, y afortunadamente olvidado para siempre, del «Vuelva usted mañana». 0« JOSÉ LUIS ANGOSO La Sociedad de la Información en España por EUGENIO FONTÁN asi nadie discute que la incorporación de las tecnologías de la InforCmación (Ti) a la actividad económica ha supuesto un enorme incremento de la productividad, tanto por los ahorros de tiempo y esfuerzo que ha propiciado como por las enormes posibilidades que ofrece —y que hemos de suponer ya incorporadas al acervo intelectual de los lectores de estas líneas—. Existe, no obstante, una conciencia cada vez más difundida de la importancia que para la sociedad española tiene una implementación mayor de estas tecnologías y la extensión de su empleo a todo tipo de servicios y aplicaciones. Este esfuerzo por promocionar y extender el uso de las TI pasa por favorecer, en primer lugar, la creación de redes, tanto extensivamente y en capilaridad como en lo referente al atocho de banda o capacidad de transmisión; y supone también que el número de personas, empresas e instituciones que acceden a estos servicios crezca lo más posible. Para que este nuevo modelo de comunicación sea plenamente Operativo y eficaz, es asimismo imprescindible el establecimiento de un marco normativo que ofrezca seguridad, acceso y garantía. LA SOCIEDAD Entre los esfuerzos realizados en DE LA INFORMACIÓN esta línea cabe destacar el de la publiEN EUROPA. cación de informes y estudios, no obsPRESENTE Y PERSPECTIVAS tante que el rigor y el interés de los Telefónica S.A. mismos no rubriquen siempre los bueMadrid, 2002, 515 piígs. nos propósitos de los aurores. Este no es, desde luego, el caso de los estudios que comentaremos aquí, los dos publicados por Telefónica, pues, aunque sólo fuera por su riqueza documental, resultan imprescindibles. Además, ambas publicaciones se presentan en formato impreso y en disco compacto, lo que resulta de gran utilidad para quienes deseen aprovechar el rico acopio de datos que aportan. El más reciente, titulado IM Sociedad de la Información en Europa, pasa revista al grado de utilización de los distintos servicios y aplicaciones agrupados habitualmente bajo la denominación genérica de Tecnologías de la Información, en los países de nuestro entorno. Los detallados análisis comparativos quedan en este volumen espléndidamente ilustrado con interesantes cuadros y tablas. El segundo título reza La Sociedad de la Información en España y presenta de forma realista los datos básicos que afectan a este sector en nuestro país. El volumen nos permite comprender que si bien el desarrollo de Internet y sus aplicaciones no acompañan los buenos propósitos de nuestros políticos, otras tecnologías, como el teléfono celular, han contribuido a un desarrollo más velo; de la Sociedad de la Información y del Conocimiento en nuestro país. Una de las conclusiones que pueden extraerse de estos dos informes es que (a libe ral ización del sector de las telecomunicaciones en España es un proceso aún inconcluso y lleno de tropiezos, pero que, no obstante, ha LA SOCIEDAD permitido ya una bajada significativa DE LA INFORMACIÓN de los precios finales y un incremenEN ESPAÑA. to notable de la calidad y de la capaPERSPECTIVA ZOO!2005 cidad de nuestras redes. En este senTelefónica S,A. tido, el juicio que merece es aprobaMadrid, 2001, 183 págs. torio. Pero no todo en este análisis puede ser tan elogioso. El retraso que se observa en España respecto a los países más desarrollados de Europa en esta materia no se debe tanto a aspectos tecnológicos o económicos como a nuestra realidad social, pues nuestro país no parece suficientemente predispuesto a la rápida incorporación de estas nuevas tecnologías. En buena medida, y así lo recoge el informe comentado en último lugar, existe una cierta apatía, que tiene su origen en lá inseguridad que suscita el intercambio de datos a través de las redes de telecomunicaciones e Internet, así como en la falta de aplicaciones verdaderamente atractivas. Entre las excepciones cabe señalar el de la telefonía móvil y el de! correo electrónico. Este retraso relativo de España exige una crítica que el informe no soslaya y que, a mi juicio, ha de remitirse a las iniciativas (o precisamente, a la falta de ellas) de las Administraciones públicas, pues son ellas, en definitiva, las que aún parecen no haber entendido que la tecnología es una herramienta puesta al servicio de los ciudadanos para la mejora de su bienestar social, Je su riqueza y de su libertad. Otro trabajo interesante es el que Montserrat Herrero ha editado bajo el título Sociedad del trahajt> y Sociedad de la Información en la era de la globalización, y que aparece con el sello de Person y Prentice Hall. Se trata de una obra colectiva, que reúne una gavilla de artículos de expertos, muchos de ellos pertenecientes al claustro de la universidad de Navarra. El promotor del libro a quien la coordinadora otorga el papel de alma mater del mismo, el profesor A Ivirá, orienta su enfoque a valorar los Cambios que el desarrollo de las Tecnologías de la Información está llevando a cabo en el mundo laboral y en su entorno social y económico, sin olvidar las implicaciones humanas. Entre otras cosas, el conocimiento está llamado a desempeñar un papel protagonista en esta nueva realidad. Porque cada vez más éste es un producto valorable y cuantificahle y que exige una nueva definición de la realidad social en que se sustenta. Ello determinará cambios en la normativa jurídica de amplio rango, desde la consideración de este conocimiento como bien sujeto al derecho de propiedad intelectual, hasta la defiSOCIEDAD DEL TRABAJO nición de un nuevo modelo de relaY SOCIEDAD ciones laborales. Alvira y Herrero DEL CONOCIMIENTO quieren contribuir con este libro al EN LA ERA necesario debate que acompañará a la DE LA GLOBALIZACIÓN reestructuración de !a Sociedad de ta Montserrat Herrero (ed.) Información, Peiirsnn Prentice Hall En las colaboraciones que se dan Madrid, 2003. 199 pága. cita en el libro no faltan referencias a tos valores de la ética y ta dignidad, palabras poco habituales en las publicaciones sobre este tema y que son muy de agradecer. No todo es tecnología y desarrollo cuantitativo; la sociedad es algo más que una fría suma de cifras, realidades e individuos. Por eso es loable que desde el ámbito académico no se escatimen llamadas a la creación de un marco que haga posible un desarrollo armónico orientado a la libertad y al bienestar. La única crítica que cabe hacer a este trabajo es la propia brevedad del volumen y el escaso conocimiento de la realidad tecnológica, de que adolecen algunas de sus colaboraciones. Es muy de agradecer el esfuerzo realizado por los autores en una línea que merece sin duda la pena continuar; y en la que, además, las Administraciones públicas, que tantas iniciativas acostumbran a realizar para difundir y promover la Sociedad de la Información y del Conocimiento, aunque no pocas veces parecen hacerlo sólo por motivos de propaganda, podrían encontrar una fecunda fuente de inspiración en el ejercicio de sus responsabilidades políticas. EUGENIO FONTÁN OÑATE