La Postguerra

La Postguerra

Observatorio

Sobre la situación del presidente Sadam Husein en Oriente Medio. Los cambios importantes del regímen moderado.

Nueva Revista

Nueva Revista 011 de Política, Cultura y Arte, ISSN: 1130-0426

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LA POSTGUERRA Por eso no conviene lanzar las Contra viento y marea, desacampanas al vuelo. Se pueden fiando las normas más elemenobtener victorias militares aplastales de la prudencia política, el tantes, como ocurrió durante la presidente de Irak, Sadam Husein, ha hecho caso omiso de las II Guerra Mundial, que se traresoluciones adoptadas por el ducen luego en derrotas polítiConsejo de Segundad de las Nacas —la esclavitud de media Euciones Unidas, por las cuales se ropa, cuya liberación del nazisle conminaba a retirarse de Kumo había sido la causa inmediawait, país al que había invadido ta del conflicto bélico—. Ahora, el pasado 2 de agosto. Hasta el mutatis mu tundís, descontado el último momento ha tenido la triunfo de las fuerzas aliadas, la gran oportunidad de efectuar cuestión es qué hacer y qué suuna salida digna, obteniendo de cederá después del cese de las paso ciertas garantías en tomo hostilidades. Porque la guerra a la solución de una serie de constituye la desestabilización problemas que desde hace desuprema. Ya lo señaló Montescadas planean sobre la atormenquieu en sus Letras persas: «En tada zona de Oriente Medio, tal el Derecho público, el acto de como se lo expuso personalmenjusticia más severo es la guerra, te el secretario general de la ONU, Javier Pérez de Cuéllar. Pero el dictador de Bagdad quería la guerra, una guerra cuyas consecuencias infernales recaerán sobre su propio pueblo, sometido a un castigo terrible por la impresionante coalición de fuerzas militares encabezadas por Estados Unidos, cuyo poder devastador no conoce parangón en los anales de la historia humana. La guerra, que en sí misma es un mal sustantivo y permanente de toda la humanidad —Wellington, con conocimiento de causa, dijo que «únicamente una batalla perdida puede ser más triste que una batalla vencida»—, acarreará, sin duda, graves repercusiones políticas para las partes implicadas. Después de este trágico cataclismo ya nada puede ser igual. El cuadro Institucional del Oriente Medio sufrirá cambios el caos en los Balcanes. Las contan sombría los dirigentes occiporque puede tener como conimportantes. Los regímenes vulsiones sucesivas en Cemroeudentales que llevan la batuta de secuencia destruir la sociedad». «moderados» de la región veropa, especialmente en la frágil la conflagración en Oriente MeDe suerte que, con toda evirán, velis nolis, afectados sus ciRepública de Weimar, quebradio reflexionen sobre la postdencia, la guerra es a la postre mientos, Por su parte, el Occiron el orden concebido por los guerra y, por encima del odio el gran factor revolucionario. dente —sobre todo la Europa vencedores de Alemania, dando que sientan hacia el vesánico Sa¿Qué sucedió, por ejemplo, tras mediterránea— debe aprestarse paso a uno de los regímenes más dam, tengan la magnanimidad las dos grandes guerras mundiaa una difícil convivencia con un abominables de todos los tiemde los grandes después de lo que les? En la primera, el Imperio mundo musulmán humillado, pos: el nazismo. A su vez. la II se anuncia como un «paseo milialemán, al tiempo que fraguaba donde el fundamentalismo gana Guerra Mundial concluyó, repetar», preludio del combate arsu propia ruina, destruía a la cada vez más adeptos, como se timos, con la entrega al yugo somado del siglo XXI. Como esRusia zarista, dando paso al coha visto recientemente en Argeviético de las naciones por cuya cribió Benjamín Franklin. «nunmunismo. Mientras, el presidenlia, Túnez, Egipto y el propio libertad se inició la catástrofe. ca hubo una guerra buena ni te Wilson acababa con el ImpeMarruecos, etcétera. una paz mala». rio austrohúngaro, sembrando Ojalá, pues, que en esta hora