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El Madrid del 98

Carlos Montes Serrano

Se hace referencia a la obra de Carlos de San Antonio "El Madrid del 98. Arquitectura para una crisis: 1874-1918", que ha analizado la crisis finisecular representada por aquel mítico 98.

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Carlos Montes Serrano, “El Madrid del 98,” accessed November 22, 2024, http://repositorio.fundacionunir.net/items/show/1355.

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El Madrid del 98

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Reseñas

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Se hace referencia a la obra de Carlos de San Antonio "El Madrid del 98. Arquitectura para una crisis: 1874-1918", que ha analizado la crisis finisecular representada por aquel mítico 98.

Creator

Carlos Montes Serrano

Source

Nueva Revista 063 de Política, Cultura y Arte, ISSN: 1130-0426

Publisher

Difusiones y Promociones Editoriales, S.L.

Rights

Nueva Revista de Política, Cultura y Arte, All rights reserved

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Language

es

Type

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edición y aplaudir a los profesores y ra de esos años ha sido mínima: algualumnos del Colegio Altair de Sevinos artículos sueltos en libros y revislla, promotores de esa magnífica tas, y la referencia obligada en las colección: todo un ejemplo de lo exposiciones temáticas celebradas. que se puede conseguir con ilusión, Este volumen, por tanto, adquiere el profesionalidad y buen gusto. valor de lo testimonial, no sólo por ser el único que trata de la arquitectuLUIS RAMONEDA ra, si no por lo original de su planteamiento, al enmarcar la producción edilicia madrileña en el universo cultural de la Generación del 98. La traslación y la analogía de conceptos entre las diversas manifestaciones del pensamiento y de la cultura siempre ha sido un ejercicio atractivo en el análisis historiográfico. Escudriñar cuáles son las ideas que mueven una determinada época y cómo se manifiestan en el arte, en la arquitectura, en la filosofía, en la literatura o en la política es una tarea Esta obra de Carlos de San Antonio, apasionante y, a la vez, no carente de Profesor Titular de la Universidad riesgos. El peligro viene cuando se Politécnica de Madrid, se encuadra quiere encorsetar la historia en un en la numerosa producción que, sistema concebido a priori, sin respedesde ópticas diversas, ha analizado tar las excepciones o lo inexplicable. la crisis finisecular representada por En este sentido, la obra que comentaaquel mítico 98. Para celebrar el cenmos es ejemplar. El autor, sin forzar tenario, a lo largo de 1998 asistimos a los afinidades, elabora su discurso múltiples iniciativas culturales. Insarquitectónico en paralelo a las ideas tituciones, artistas, críticos, historiaque flotan en el ambiente. Así, la cridores, literatos, periodistas, políticos sis del Iluminismo se relaciona con y estudiosos en general, sumaron sus la del Clasicismo y sus postulados esfuerzos para revisar aquellos aconvitruvianos; el sueño medieval del tecimientos con publicaciones, coloRomanticismo con el resurgir del quios, conferencias y exposiciones Gótico; los racionalismos de nuevo surgidas en los distintos ámbitos. Sin cuño —el positivismo de Comte y el embargo, la atención a la arquitectuentre la política, la sociedad, la cultura, el arte y la arquitectura. Se dan en todas ellas conceptos sinónimos. Así, el tradicionalismo de Menéndez Pelayo se traduce en el regionalismo de Rucabado y de Aníbal González; el casticismo unamuniano lo interpreta Torres Balbás, casi al pie de la letra, en sus escritos; los regeneracionismos institucionista y del grupo de escritores del 98 se encauzan en la búsqueda de una arquitectura moderna española hacia dos direcciones opuestas: la que mira a Europa y la que se inspira en nuestra tradición. De los que buscaron en Europa soluciones modernas, unos se reafirEdificio de la Equitativa, finales siglo XIX. maron en que el eclecticismo seguía siendo la garantía de europeización, mientras que otros entendieeclecticismo de Cousin— con el ron que éste ya estaba agotado, y eclecticismo arquitectónico; la crisis prefirieron las nuevas imágenes que del positivismo y la irrupción de los se difundían de la Secesión vienesa, movimientos irracionalistas y vitade Alemania y de Holanda. Sin listas con el modernismo. embargo, fueron más los que buscaLa trama del relato adquiere un ron en nuestro rico legado histórico interés particular cuando se estudia la inspiración para la arquitectura la decadencia española, la crisis del moderna española. Surgió entonces 98 y la eclosión del regeneracionisla polémica sobre cuál de los estilos mo. Sucesivamente aparecen en históricos era el más español. La opiescena Sanz del Río y el krausismo, nión más extendida fue que el Giner de los Ríos y la Institución mudéjar y el plateresco, aunque Libre de Enseñanza, Menéndez Pelatambién el barroco en su particular yo y el tradicionalismo, Unamuno y versión hispánica. Al mudéjar se le el casticismo y los escritores de la consideró como el más propio y casGeneración del 98. Para el autor, tizo de los estilos nacionales. La pocas veces como en el 98 puede mayoría de las fachadas de los edifiestablecerse una afinidad tan clara cios, que entonces se construyeron en ladrillo, fueron trazadas con aparejos mudéjares. El neomudéjar se convirtió así en el estilo propio de Madrid. Mientras del mudéjar se tomó, fundamentalmente, lo constructivo —la tracería para el aparejo del ladrillo—, del plateresco se imitó su aparato formal. Los modelos ornamentales —pináculos, cresterías, torres...— de la Universidad de Alcalá de Henares, de San Juan de los Reyes de Toledo y del Palacio de Monterrey de Salamanca pasaron a ser los paradigmas del estilo. La segunda parte del libro, es una «Guía de Arquitectura» de 1874 a Primer tramo de la Gran Vía, 1928. 1918. Los límites corresponden a un periodo relativamente homogéneo, que va desde la Restauración de «Modernismo», «Arquitectura del Alfonso XII, en 1874, hasta el final hierro», «Estilos nacionales y regiode la Primera Guerra Mundial, en nales», «La singularidad de Antonio 1918, cuando aparecen en España las Palacios» y «Hacia un racionalismo vanguardias artísticas y literarias. La constructivo». Advierte el autor, no Guía tiene una estructura temática. sin razón, que exceptuando el El autor se arriesga a clasificar por «Modernismo», la «Arquitecturadel tendencias los 86 edificios que se deshierro» y el «Medievalismo» —en criben, en contra de lo habitual en tanto que pretende recuperar la Edad este tipo de guías, que es la ordenaMedia como concepción del mundo ción cronológica, zonal o por itineray no como estilo—, los demás capíturios. Aunque podamos objetar si tal o los podrían clasificarse con el nomcual edificio podría ubicarse en uno u bre genérico de «eclecticismos». Si otro estilo, no cabe duda de que, no lo hace es porque los «Estilos desde el punto de vista didáctico y nacionales y regionales» tienen una metodológico, valía la pena correr el característica genuinamente españoriesgo. Los estilos o capítulos son: la que les aleja de otros historicismos «Medievalismo», «Eclecticismo», que surgieron en Europa con el romanticismo. También la figura de Antonio Palacios merece una consideración especial, pues su arquitectura es difícilmente clasificable. El interés que suscita la lectura de este libro se debe a que el texto es una original interpretación de la arquitectura madrileña del cambio de siglo, en su contexto cultural, político y social, leída en paralelo a conceptos afines del pensamiento y de la Octubre de 1882, Lou Salomé viaja a literatura regeneracionista del 98, Venecia para ver al doctor Breuer. La que nos transmitió una visión de la irritación que le causa haber recibido España del desastre que, con los una nota impertinente en la que la años, se hizo tópica. En este libro, el desconocida Fráulein Salomé deterautor sigue las pautas de su anterior mina día, hora y lugar de encuentro volumen 20 años de Arquitectura en no mengua la disponibilidad del Madrid. La Edad de Plata: 19181936, médico. El doctor y el lector son presa editado también por la Comunidad de esta fascinante mujer —joven, de Madrid en 1996, y que recibió el interesante, delgada— que, envuelta Premio de Urbanismo, Arquitectura en pieles, avanza con decisión y diriy Obra Pública del Ayuntamiento ge su mirada osadamente a los ojos de Madrid, en el apartado Medios de del investigador. Difusión, y la Mención Especial «Nietzsche está enfermo, muy de los Premios COAM en el apartado enfermo. Necesita su ayuda». La de Difusión de la Arquitectura, descripción de todos los síntomas Periodismo y Publicaciones. Los dos —fuertes migrañas, náuseas, ceguevolúmenes, en conjunto, forman ra inminente, insomnio, dosis peliuna historia de la arquitectura grosas de morfina que no mitigan el madrileña desde 1874 a 1936, interdolor y días enteros mareado— pretada, como hemos dicho, según no resulta suficiente para elabounas coordenadas interdisciplinares rar un diagnóstico preciso. ¿Por más amplias, en una analogía de conqué había accedido a verle? «Es la ceptos con otras esferas de la cultura desesperación del profesor Nietzsy del pensamiento. che, no su corpus, lo que le pido que cure». ¿Qué le estaba exigiendo CARLOS MONTES SERRANO Lou Salomé?